Sergio, el vecino muerto tras la explosión de la petroquímica, muy querido por sus vecinos

  • Todo el mundo lo conocía porque había regentado una frutería

  • Ahora cuidaba de sus padres y su nieta

  • No era habitual que estuviera en casa en el momento del accidente

A Sergio Millán lo conocía casi todo el mundo en Torreforta. Él y sus tres hermanos habían regentado una frutería y otra tienda en el barrio. Cuando la plancha metálica entró en su edificio deberían haber estado en la casa, su mujer y su nieta. Fue su esposa, que estaba en el portal, quien lo encontró bajo los escombros.

A sus 55 años, Sergio Millán, el vecino fallecido a causa de la explosión en la fábrica de óxido de etileno de Tarragona, estaba casado y tenía una nieta.

Todo el mundo lo conocía en el barrio de Torreforta. Primero sus padres y después él con sus tres hermanos habían regentado una frutería, que tuvo que cerrar por la crisis.

Después trabajó en otra tienda en el barrio junto a sus hermanos, un comercio que se había terminado quedando el pequeño de sus hermanos, según informa el Diario de Tarragona.

Sergio ahora se dedicaba a cuidar a sus padres, que vivían en la misma plaza que él, y a su nieta.

No era habitual que estuviera en su casa en el momento del accidente. Solían estar su mujer y su nieta. Sin embargo, el martes ellas habían salido a la calle. Estaban en el portal con unos vecinos cuando la placa metálica entró por la ventana de la tercera planta y desplomó el techo de su casa. Fueron los vecinos y la mujer quienes encontraron a Sergio bajo los escombros.