La unidad de buceo de los Bomberos de Zaragoza ha suspendido el operativo de búsqueda subacuático del niño de 13 años que desapareció el sábado en el río Ebro mientras se bañaba con unos amigos. Las fuertes tormentas caídas en la ciudad han aconsejado la detención de las maniobras por el riesgo de descarga eléctrica sobre los buceadores y por el aumento de la corriente que ha enturbiado el agua, dificultando la visibilidad en el interior del río.
Los bomberos han rastreado durante estas dos jornadas el tramo donde un pescador, que dio la voz de alarma, lo vio por última vez, a la altura del embarcadero de la Expo, en el meandro de Ranillas. Hasta que anochezca, los efectivos van a centrar sus trabajos de búsqueda en las orillas del río, algo que harán en barca y a pie durante aproximadamente tres horas.
Además, continuarán también buscando en los 90 archivos de imágenes capturados por la unidad de drones que, a una altura de entre 70 y 90 metros, ha sobrevolado la zona, desde el embarcadero al puente de La Almozara, hasta que las situación meteorológica lo ha permitido.
Los bomberos dan por concluidos los trabajos de búsqueda subactuática en el tramo del río donde ha desaparecido este joven, de nombre Karim, quien en el momento del hundimiento llevaba una camiseta fucsia de su equipo de fútbol.
A partir del lunes, la búsqueda, que comenzará en torno a las 8.30 horas, se centrará en el siguiente tramo, de aproximadamente unos cien metros, en dirección a la pasarela del Voluntariado.