A las tres jóvenes, le sigue el caso más reciente de una adolescente de 14 años, del que se ignoran más detalles, de acuerdo al periódico El Comercio.
Según esta fuente, las jóvenes ingresaron con un coma etílico, aunque sus compañeros aseguraban a los médicos que no habían ingerido nada de alcohol.
Los análisis de sangre, realizados en los hospitales de Cabueñes y Jove, en Gijón, revelaban un alto contenido de alcohol en sangre, con toda probabilidad alcanzada por la vía vaginal.
Los médicos han advertido del alto riesgo de esta práctica, dada las características de la vagina, una zona altamente irrigada que hace pasar el alcohol directamente a la sangre sin metabolizarlo a través del hígado.
De esta manera es muy fácil sufrir un coma etílico además de los daños que puede provocar en la mucosa vaginal.