Uno de los apartamentos que integran el edificio 220 Central Park South en el neoyorquino barrio de Manhattan (Estados Unidos), considerado como la vivienda más cara de todo el país, ya ha sido vendida por un precio de 238 millones de dólares.
Según la revista 'Forbes', ha sido el empresario Ken Griffin quien ha adquirido el inmueble, situado frente al emblemático Central Park.
Griffin, fundador del fondo de inversiones Citadel, le ha tomado el relevo al multimillonario Barry Rosenstein; otro empresario que pagó 147 millones de dólares por una casa en East Hampton.
Los metros cuadrados de los que disfrutará el empresario en su recién adquirido apartamento son de 2.230 metros cuadrados, el equivalente a la mitad de un campo de fútbol.