Las redes sociales se han hecho eco de unas imágenes en las que se pueden ver a un grupo de turistas extranjeros fotografiándose en la cima de un peligroso volcán indonesio poco antes de que entrara en erupción. Las imágenes fueron grabadas el 18 de abril en el borde del cráter del monte Agung, ubicado en la isla de Bali. Las autoridades locales habían establecido una zona de exclusión de cuatro kilómetros alrededor del volcán.
La Agencia para la Mitigación de Desastres de Indonesia (BNPB) ha reprobado el actuar de los turistas por ignorar las advertencias. A pesar de que se ha prohibido realizar actividades dentro de un radio de cuatro kilómetros, todavía hay turistas y guías turísticos que están desesperados por ir al cráter. Esto es muy peligroso porque el monte Agung puede entrar en erupción en cualquier momento, ha señalado el
portavoz de la BNPB, Sutopo Purwo Nugroho, en su cuenta de Twitter.
Efectivamente, el monte Agung entró en erupción la madrugada del 21 de abril, arrojando cenizas a dos kilómetros de altura, por lo que las autoridades locales establecieron el nivel 3 del sistema de alerta de 4 niveles. La lluvia de ceniza se extendió a los distritos de Karangasem, Bangli y Klunglung. Ello también llevó a que se pidiera el uso de máscaras en los habitantes de zonas cercanas que estén siendo afectadas para prevenir efectos secundarios en el sistema respiratorio. De momento, su actividad ha quedado registrada en vídeo y ha sido compartida en redes sociales, no afectando al espacio aéreo.