Según ha publicado el diario 'Coventry Telegraph', el progenitor de 54 años, reaccionó con "ira incontrolada" atacando brutalmente a su hija de 16 años, que le había confiado que estaba "luchando con su identidad". La corte ha señalado que "esa violación implicó degradación y humillación".
Ha sido condenado a 21 años de cárcel después de ser declarado culpable de nueve cargos de asalto indecente, uno de indecencia y de tres violaciones durante los años 80 y 90.
El juez Andrew Lockhart le dijo al emitirse el fallo que "el tribunal escuchó a ambas mujeres. Ambas han sido seriamente dañadas psicológicamente por su comportamiento. Escuchar las pruebas de la víctima, su sentimiento de culpabilidad al dejar a su hermana, fue la prueba más desgarradora de la evidencia".
El padre se había declarado ‘no culpable’ ante el Tribunal de la Corona de Warwick. El delito se produjo durante un período de más de 20 años a lo largo de los años 80 y 90. Comenzó con el abuso sexual de una hija y, después de que ésta se fuera de casa, pasó a abusar de la otra hija.
El juez se dirigió al padre al leer el fallo: "A través de un período de 20 años agredió sexualmente a sus hijas. Los abusos sexuales a la primera hija duraron tres años desde que la niña tenía 11 años”. Según la sentencia, "le afectó mucho. Dejó el hogar y pensó que su hermana estaría a salvo porque creía que nunca la tocaría de la misma manera”.
Pero la otra hija sufrió los mismos abusos. Cuando tenía 16 años, "se dio cuenta de que era lesbiana y, luchando con su identidad como mucha gente hace a esa edad, decidió decírselo. Usted reaccionó mostrando cólera real e incontrolada, y decidió violarla para mostrarle por qué sería mejor tener relaciones sexuales con hombres que con mujeres. El testimonio de su hija fue angustioso. Esa violación implicaba degradación y humillación. La agresión demostró su hostilidad hacia ella como lesbiana".
Un portavoz de la NSPCC (Asociación Nacional para la Prevención de la Crueldad contra los Niños de Reino Unido) indicó que "las víctimas en este horrible caso han demostrado un increíble valor para hablar y asegurarse de que este violador fuera llevado ante la Justicia. Es vital que ahora reciban el apoyo que necesitan para intentar avanzar con sus vidas. Este caso muestra que los sobrevivientes de abuso deben ser escuchados, no importa cuánto tiempo hace que sucedió o quién fue el agresor. No necesitan sufrir en silencio”.