“No pretendo ofender a nadie” ha dicho Willy Toledo desde la iglesia de San Carlos Borromeo de Vallecas, en Madrid. No obstante, ha explicado que sus palabras se engloban en “su legítimo derecho a la libertad de expresión” y por eso “sigo sin asistir a las citas judiciales”.
“No creo que haya cometido ningún delito y no creo que tenga que comparecer ante ningún juez”, ha subrayado el actor, que ha comparecido acompañado por otros artistas como Javier Bardem y Alberto Dan Juan.
No es la primera vez que Toledo da plantón a la justicia, que le acusa de un delito de ofensa contra los sentimientos religiosos por decir “me cago en Dios”. No obstante, cuando el actor ha comparecido el juzgado había suspendido su comparecencia por la huelga general de jueces y fiscales. En el escrito de aplazamiento se le recuerda al actor que, en caso de no comparecer, "ni alegar causa justa que se lo impida" podrá decretarse su detención.