Varios vídeos y grabaciones han permitido a los investigadores del incendio en Campanar, en Valencia, acotar que las llamas comenzaron en el piso número 86, que ya ha sido rastreado por los investigadores. Todo apunta al balcón como el lugar donde se propagó el fuego, pero falta por determinar la causa concreta del incendio.
La Policía Científica ha recogido todas las pruebas necesarias para explicar las causas: "El reconocimiento del edificio, palmo a palmo, está hecho. Ahora ya quedan cuestiones propias de la investigación", ha indicado la delega del Gobierno en la comunidad, Pilar Bernabé. Los agentes creen que el fuego comenzó en la terraza del piso 86. Su dueño no estaba. "Tiene que ser, por las imágenes que hemos ido viendo, en el exterior. No es un incendio de interior porque las ventanas estaban cerradas", explica Antonio Tortosa, presidente de Tecnifuego.
En un vídeo se observa la progresión del fuego por la fachada. Incluso se ve cuándo cae el toldo. Aunque todo indica que no fue el motor del toldo el origen. Porque, según el conserje y la administradora, era manual. "Tenemos que encontrar el origen (del foco)", detalla Félix César Alonso, director técnico en Synthesis Investigación de Siniestros. La Policía busca un cortocircuito y podría tener origen en la caja de la persiana eléctrica.
Julián, el conserje, vio el humo saliendo por los alójenos de la séptima planta y avisó a los vecinos. Encarna es una de las personas que vivía en la octava planta: "Ya había mucho humo negro. Había que salir corriendo. Yo bajé por las escaleras de incendios". Mientras, Ricardo, recuerda con tristeza a sus vecinos de enfrente, el matrimonio muerto con sus dos hijos. A diferencia de su propio hijo, esperaron a los bomberos: "Mi hijo salió porque me hizo caso a mí".
Para entonces, las dos torres que conformaban el complejo residencial ya se habían incendiado. Porque el viento lo propagó lateralmente por las fachadas que ardían al quemarse el polietileno presente en el interior de los paneles de aluminio y porque las dos torres se comunicaban por los rellanos (57 metros de pasillos de paredes de placas de yeso laminado que ardieron): "Han desestabilizado el aluminio y ha entrado el fuego dentro del cubo. Si el material que configuraba el compacto podía arder, pues ardía", Luis Sendra, decano del Colegio de Arquitectos de la Comunidad Valenciana (COACV).
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento