Tan sólo han pasado unos días desde que Marta López estuviera disfrutando en las playas de El Palmar, compartiendo con todos sus seguidores unas fotografías en las que lucía su transformación física, tras meses de dieta y ejercicio.
Ahora, la exgranhermana está disfrutando de unos días de descanso en Asturias. Precisamente allí, Marta ha querido visitar con toda la familia a la virgen de Covadonga. ¿El motivo? Hace 5 años que la concursante de 'Gran Hermano 2' y 'GH VIP' pidió en el santuario quedarse embarazada de un hijo y, tras meses intentándolo sin resultado, a los quince días de la petición, Marta estaba esperando al pequeño Javier.
Una vez que se quedó embarazada pidió que todo el embarazo fuera bien y como recompensa ella haría el camino de Santiago. Pues dicho y hecho. En la misma publicación en la que Marta ha enseñado como ha llevado al pequeño de la casa frente a la virgen de Covadonga, también ha mostrado las imágenes en Santiago que demuestran que realizó el camino como parte de su promesa. (Cuarta y quinta imagen en la publicación)
"Lo prometido es deuda, la historia que os dije ayer, intentaré ser breve. Hace 5 años vine a visitar a la virgen de Covadonga y le pedí un deseo: “quiero ser madre otra vez de un niño, que sea rubio y tenga ojos azules” y lancé una moneda al agua... Yo llevaba 1 año con el amor de mi vida) y tenía dos hijos de mi anterior relación", ha explicado la exgranhermana en la publicación, para finalizar diciendo que: "a los 15 días me quedé embarazada, después de llevar meses intentándolo y nació el niño, rubio y de ojos azules (como su papá) así que hice la promesa en el embarazo que si todo salía bien haría el camino de Santiago. Así que ahí os enseño una foto llegando a Santiago y cumplí, pero hoy he venido a que la Virgen conozca a Javier y a darle las gracias".
Lo cierto es que Marta está muy feliz actualmente con su familia y centrada es su faceta como empresaria. Hace unos días, la que fuera colaboradora del debate de 'GH' o de 'Salvame', confesaba el motivo por el que había dejado la televisión aparcada a un lado.