"El fallecimiento de Adolfo Suárez me llena de consternación y de pena. Tuve en él a un amigo leal y, como Rey, a un colaborador excepcional. En todo momento, tuvo como guía y pauta de comportamiento su lealtad a toda la corona. Mi gratitud al duque de Suárez es por todo ello honda y permanente. Mi dolor es grande. El dolor no es obstáculo para recordar y valorar uno de los capítulos más brillantes: la Transición. Fue un hombre de Estado que puso por delante de los intereses personales y de partido, el interés del conjunto de la nación española. Adolfo Suárez dio lo mejor de sí mismo. El ejemplo que nos deja es muestra de que junto, los españoles, podemos superar las mayores dificultadose. Termino este emocionado recuerdo a Adolfo Suárez enviando todo mi cariño a sus hijos y toda su familia", ha comunicado el Rey.