GH DÚO, en directo: Miguel le dice a Maica que Sergio la está dejando de teatrera

La conversación entre Miguel y María sobre las mentiras de Noemí se ve abruptamente interrumpida cuando Maica, eufórica, empieza a gritar: "¡Está nevando!". Su emoción es desbordante mientras recorre la casa anunciando la inesperada nevada.

Miguel y Maica, cogidos de la mano, salen corriendo al patio para disfrutar del momento. Con los copos cayendo a su alrededor, Maica recuerda que su deseo de ver nevar en Guadalix quedó grabado en la casa, y ahora, por fin, se ha hecho realidad. Es un instante mágico, lleno de felicidad y emoción compartida.

La jornada en la casa ha estado llena de momentos de reflexión, risas y emoción, con Maica cumpliendo su sueño de ver nevar en Guadalix y los concursantes fantaseando con lo que vendrá después del reality.

Os esperamos mañana en el directo para seguir viviendo juntos cada detalle. ¡Que descanséis! 🌙✨

El desorden en los horarios es evidente dentro de la casa. Los concursantes intentan adivinar la hora, convencidos de que aún no ha pasado de las 23:30, cuando en realidad ya se acercan las 2 de la mañana. A pesar de la confusión, siguen en plena charla nocturna tras haber cenado tarde.

Durante la conversación, Óscar comparte una idea que le entusiasma: le encantaría participar en un reality fuera de España. Imagina la experiencia de convivir con nuevas costumbres, enfrentarse a discusiones diferentes y conocer compañeros de otras partes del mundo, una aventura que le parecería emocionante y enriquecedora.

María lanza una promesa con entusiasmo: "En el hotel la liaremos". La idea de compartir hotel tras salir de la casa para celebrar el final de la edición emociona a los concursantes, que ya fantasean con una gran fiesta y momentos de diversión juntos.

Mientras tanto, Óscar sigue agotado. Explica que no ha dormido nada la noche anterior y por eso ha pasado el día descansando. Miguel, con ganas de alargar la noche, propone trasnochar hoy, y Óscar, aunque secundando la idea, decide echarse un poco más de siesta para aguantar el ritmo

La cena ha terminado, pero el buen humor sigue presente en la casa. Mientras el tazón de Chococrispis sigue lleno para los compañeros, Miguel y Maica se divierten fregando los platos juntos. Entre bromas, canciones y frases icónicas, convierten una tarea cotidiana en un momento de risas y complicidad. Van a despertar a su compañero Óscar para divertirse juntos.

El ambiente es ligero y agradable, sin tensiones ni conflictos. Se respira buen rollo en la casa, con los concursantes disfrutando de una noche tranquila y distendida.

El ambiente en la casa es de total tranquilidad. Los concursantes parecen estar agotados y sumidos en sus pensamientos. Cada uno se encuentra en un rincón diferente, ya sea descansando en silencio o durmiendo. No hay discusiones, ni tensiones, ni conflictos. Es un momento de calma en el que la convivencia parece fluir sin problemas ni malos rollos.

Sergio comparte con sus compañeras que le gustaría casarse y ser padre, imaginando el momento en que vea a Nazaret vestida de blanco. Su confesión da pie a que María y Marieta también fantaseen sobre sus bodas ideales y sus casas soñadas.

En medio de la conversación, Marieta le pregunta a María si se ha imaginado teniendo intimidad con José, y María le devuelve la pregunta sobre Suso. Ambas coinciden en que, cuando llegue el momento de reencontrarse con ellos fuera del programa, les dará mucha vergüenza. Ha sido una charla distendida y divertida entre amigas, donde han compartido sus pensamientos sin filtros.

Sergio, en tono algo juguetón, comienza a explorar sus "poderes" y a interpretar cómo podrían estar sus compañeros en la casa. Sobre Suso, dice que lo imagina cansado, después de haber hecho deporte intenso, y lo visualiza descansando en el sofá sin mirar el directo. También menciona que José no parece estar viendo el directo en ese momento.

Con respecto a Rubens, Sergio bromea diciendo que, como no ha visto su cara últimamente, no sabe exactamente qué estará haciendo, pero se muestra curioso sobre su estado.

María abre su corazón y explica a sus compañeros cómo fueron las dos últimas semanas antes de su ruptura con su ex. Detalla que esas semanas fueron cruciales, ya que se dio cuenta de que ya no lo echaba de menos, lo que la hizo tomar la decisión de poner fin a la relación. A pesar de que él le haya dicho cosas que podrían hacerla dudar, ella asegura que no se arrepiente de nada.

También comenta que, a lo largo de la relación, él nunca le pidió casarse, algo que le quemaba y que, con el tiempo, hizo que perdiera la ilusión por la relación.

La conversación se desvía hacia otras ediciones de Gran Hermano, mencionando a concursantes como Azahara y Juanma, así como a Carlos Sobera y las parejas que surgieron a raíz del programa, incluyéndose a ellos mismos. Mientras tanto, los concursantes siguen pasando por el confesionario uno a uno.

María comparte con sus compañeros que estuvo 12 años con su ex pareja y expresa estar feliz de que él haya rehecho su vida y le estén yendo bien las cosas. Añade que, a diferencia de ella, él sí habla mal de su relación pasada.

Maica, tomando el tema con humor, concluye que Gran Hermano ha formado dos grandes parejas dentro de la casa y se pregunta, en tono especulativo, si quizás el programa le propuso a su ex entrar al reality, sugiriendo que tal vez él fue quien no aceptó.

La casa está muy tranquila, y Oscar no puede evitar reírse del apodo que Rubens le puso a Miguel en Plató: "Frigentiti", debido a que siempre está detrás de él como un mono titi. Oscar encuentra el mote muy elocuente y no para de reír cada vez que lo recuerda. Junto a Miguel, siguen riendo en la cama, hablando en voz baja para que nadie les escuche.

Mientras tanto, Maica sigue arreglándose el cabello en el baño, completamente ajena a la diversión de los chicos. Los demás concursantes continúan descansando, disfrutando de un momento de paz en la casa.

Maica, acompañada de Miguel y Óscar en el baño mientras se peina, sigue quejándose del olor a salmón que se le ha quedado en el pelo. Aprovecha el momento para seguir lamentándose sobre el incidente del horno, mostrando su malestar por la situación. Mientras tanto, el resto de los compañeros de la casa están descansando tranquilamente en la habitación, ajenos a la discusión que se lleva a cabo en el baño.

Aunque Maica y Óscar se quejan de la falta de compañerismo, no parecen dispuestos a confrontar el problema directamente con sus compañeros. En cambio, se reúnen con Miguel en el jacuzzi, donde le cuentan lo sucedido con el horno y las patatas quemadas. Miguel está completamente de acuerdo con ellos y, aprovechando la ocasión, también se queja de las actitudes de los demás.

El ambiente en el jacuzzi es relajado y, a pesar de las quejas, se lo pasan bien, riendo juntos. Miguel concluye, entre risas, que está dando más "juego" al programa en su corta estancia que el otro grupo de la casa.

Por otro lado, Sergio comenta que le gustaría que ganara Marieta o él mismo, destacando que “le estaría muy bueno” ganar.

Maica, visiblemente molesta, le dice a Óscar que son "tontos" frente a sus compañeros por limpiarles y cocinarles.

Indignada, muestra a cámara las zonas sucias de la casa y acerca las patatas quemadas para que se vea bien lo que ha pasado. Además, se queja ante el Súper de la falta de higiene, el estado en el que han dejado la cocina y la ausencia de compañerismo.

Entre la frustración, Maica y Óscar terminan riéndose de la poca actividad de sus compañeros en la casa y acuñan el término "amebas" para referirse a ellos, asegurando que apenas se mueven mientras ellos sí se esfuerzan en las tareas diarias. La impaciencia en los últimos días del concurso parece estar pasando factura, aumentando la tensión en la convivencia.

Mientras los concursantes se arreglan para la sorpresa que el Súper les ha preparado, Maica se encuentra sola en el baño preparándose. En otro punto de la casa, Miguel, María, Sergio y Marieta conversan sobre intolerancias alimentarias, y luego Miguel, María y Marieta comentan las diferencias de precios en la vivienda entre distintas comunidades.

En la cocina, Maica come sola y está visiblemente molesta. La razón: sus compañeros se sirvieron la comida que había en el horno, pero olvidaron apagarlo, lo que provocó que las patatas que quedaban se quemaran y ya no pudieran aprovecharse.

Cuando Óscar regresa del confesionario, Maica le cuenta lo sucedido, quejándose de que mientras ella estaba en la ducha y él fuera, sus compañeros no fueron capaces de apagar el horno. Enfadada por la falta de cuidado, le sugiere a Óscar que quizás deberían empezar a cocinar solo para ellos.

El ambiente en la casa está tranquilo, con la mayoría de los concursantes sintiendo que los días se hacen más largos y pesados. Sergio comenta con humor que se marcha de Gran Hermano habiendo aprendido sobre uñas, tacones y explorando su lado más femenino.

María intenta animar a Marieta y Sergio a dar alegatos para convencer a los espectadores que siguen el directo, pero Sergio se muestra reacio a seguir insistiendo y Marieta admite que le da vergüenza. Mientras tanto, Miguel y María son los únicos que están comiendo salmón mientras observan a sus compañeros descansar.

María reflexiona sobre su salida de la casa, asegurando que sintió que fue demasiado rápida y que le habría gustado una despedida como la que tuvieron Miguel y Óscar.

En cuanto a las pruebas semanales, los concursantes coinciden en que preferirían evitar la prueba de la radio o, en su defecto, que se combinara con una fiesta para hacerla más llevadera.

Mientras Sergio descansa en el sofá, Marieta conversa con María sobre los reencuentros en Gran Hermano y expresa su curiosidad por cómo serán. Recuerda su salida de Supervivientes y cómo su familia se movilizó por completo para recibirla, reorganizando sus vidas con tal de estar con ella en ese momento especial.

La charla deriva en el tema del cariño y las demostraciones de afecto. Marieta confiesa que, gracias a su relación con Suso, se dio cuenta de que en realidad es una persona cariñosa y detallista. Explica que, cuando participó en La Isla de las Tentaciones, su pareja de aquel entonces solía reprocharle que no lo era, lo que la hizo pensar que quizá tenía razón. Sin embargo, con Suso descubrió otra faceta de sí misma.

Además, Marieta profundiza en la relación con su familia y la estrecha conexión que tiene con cada uno de sus miembros, mientras María la escucha con interés y le hace preguntas.

Sergio expresa su deseo de que, si es eliminado, lo reciba la mayor cantidad de amigos posible. Además, comenta que, en caso de ser expulsado el lunes, podría encontrar un billete barato para regresar a casa.

Marieta aparece con un look arreglado, lista para la sorpresa en el confesionario, luciendo la ropa que le prestó María. Más tarde, junto a María y Sergio, repasan los momentos vividos en la casa con otros concursantes que ya no están.

Curiosa por la vida fuera del reality, Marieta le pregunta a María sobre su rutina de los sábados antes de entrar en Gran Hermano. María, en cambio, reflexiona sobre el cambio de horario al que tendrán que adaptarse al salir y asegura que necesitarán mucho descanso. Sin embargo, Marieta tiene otros planes: dice que no piensa dormir demasiado porque quiere centrarse en sus redes sociales de inmediato.

Los concursantes parecen estar arreglándose para acudir más tarde al confesionario, donde probablemente responderán preguntas sobre por qué deberían ser votados. Sin embargo, por ahora, todo se mantiene en secreto.

En la habitación, Miguel y Óscar comentan sobre algunas falsas apariencias que han visto en la casa y enfatizan que lo importante es que el público vea la realidad del concurso. También coinciden en que Sergio ha estado últimamente muy negativo y quisquilloso, hasta el punto de que ya no les apetece acercarse demasiado a él.

María repasa el concurso de Marieta y expone sus razones para que los espectadores la voten desde casa. También destaca el buen desempeño de Sergio a lo largo del programa.

Sergio, por su parte, asegura que no ha hablado mal de nadie durante el concurso, salvo en el confesionario cuando tuvo tensiones con Álex, aunque luego también se lo dijo en persona. Se define como un tipo auténtico.

María añade que su grupo siempre ha ido de frente, algo que también ocurría con Jose. Poco después, Sergio se dirige al confesionario con su sombrero puesto.

Mientras tanto, Marieta admite que se siente intensa y que la cuenta atrás la tiene algo nerviosa, especialmente de cara al lunes, cuando solo queden tres concursantes en la casa.

Óscar se dirige a la cocina para prepararse algo de comer y, en conversación con Sergio y María, menciona que la última persona con la que habló hizo referencia a Sergio, aunque no logró entender del todo sus palabras. Según Óscar, la mujer expresó su aprecio tanto por él como por Sergio dentro de la casa y confesó que dudaba a quién votar. Finalmente, se decantó por Óscar debido a su vínculo como paisanos.

Sin embargo, al compartir la historia con su compañero, Óscar omite este último detalle y se limita a decirle que la mujer mencionó su admiración por Rubens y por él, lo cual también era cierto.

María aprovecha para seguir haciendo campaña a favor de Marieta y Sergio desde el baño dirigiéndose directamente a la cámara mientras Marieta se peina. Maica y Miguel aprovechan para echarse una siesta.