Armando, padre de Mónica Pont: "El culpable de que perdiera la custodia he sido yo"

telecinco.es 14/05/2013 20:46

Mónica Pont se sentaba en el plató del Deluxe en lo que fue una entrevista polémica. La actriz estaba enfadada por el reportaje de investigación que Sálvame había emitido sobre su vida personal y profesional. Negaba las acusaciones, se enfadaba con los colaboradores por sus preguntas y, finalmente, unos comentarios sobre el marido de Lydia Lozano hicieron que Jorge Javier Vázquez se enfadara y la despidiera de plató.

Pasado el fin de semana, ella se defendía en ‘Sálvame’ y también lo hacía su madre. Teresa cuestionaba a Jorge Javier Vázquez por las críticas hacia su hija, también al resto de colaboradores acusándoles de inventar informaciones sobre la modelo y reivindicaba la carrera de Mónica.

Su hija le agradecía su defensa desde el exterior y, finalmente, ambas se fundían en un abrazo en directo. Sin embargo, lo que no esperábamos es que el padre de Pont interviniera telefónicamente en el programa. Armando ha criticado a Mónica y ella le acusaba de posicionarse del lado de su ex marido a la hora de luchar por la custodia de su hijo.

Y Armando llamaba precisamente por este motivo: “el único culpable de la trayectoria de críticas que ha tenido Mónica, incluso que perdiera la custodia de su hijo he sido yo”, la modelo lloraba: “no me lo esperaba para nada”, decía mientras el programa intentaba recuperar la conexión interrumpida con su padre. Mónica recordaba que su intención es ganar dinero para poder pagar la pensión a su hijo y seguir luchando por su custodia: “claro que se lo he reprochado, yo estaba como cualquier madre, luchando por tener a mi hijo”, decía.

Finalmente, Armando intervenía de nuevo: “se viene diciendo hace tiempo que yo fui a testificar en contra de mi hija en el juicio de las cautelares de separación, antes de entrar la familia me dijo una serie de barbaridades que tenía que decir en el juicio, dije que yo eso no lo diría. Entonces ellos creyeron oportuno que no les interesaba como testigo y no quisieron que entrara”, aclaraba Armando.

Continuaba explicando que su intención testificando en el juicio era la de abogar por la custodia compartida, pero no contra Mónica: “pero ellos querían que yo hablara mal de Mónica, pero que muy mal”. Es más, según Armando, la familia Sagrera, de su ex marido, le pidió que firmase un documento para unirlo a los autos que se entregarían: “yo no quise firmar el documento porque ponía cosas de mi hija que no era para lo que yo quería ir”.

Mónica se defendía: “Si avalabas la custodia compartida fastidiabas a tu hija porque se tendría que quedar pudriéndose en Gerona como me quedé” y es que Mónica necesitaba regresar a Madrid para conseguir trabajo. “¿No hubiera sido mejor la custodia compartida? Aceptar una casa y un dinero que te daba”, replicaba su padre y Pont se mostraba contundente: “no iba a venderme ni por una casa ni por dinero”.

Armando quería dejar algo muy claro: “no he cobrado nunca de Sagrera porque no me hace falta, ni antes ni nunca”. Pero a Mónica le importaba algo más que la cuestión monetaria y reprochaba a su padre su actitud: “tú has tenido muy buena relación con él sabiendo que me ha hecho daño”.