Las dificultades económicas por las que está pasando han llevado a Julián a pensar en quitarse la vida. "Alguna vez se me ha pasado por la cabeza quitarme la vida. Una noche lo vi claro, no podía más. Si hubiera tenido los medios me hubiese quitado de en medio", cuenta derrumbado el hijo de Carmina Ordoñez. "Mi madre murió sin que pudiera cogerle la mano, eso me persigue y me perseguirá toda mi vida", ha dicho Julián más tarde, que asegura que tras la muerte de su madre no ha vuelto a ser feliz.

"Uno de los días más difíciles en mi vida es cuando me recetan las mismas pastillas que a mi madre. Hacer el mismo ritual que hacia mi madre con las pastillas todas las noches, me costaba mucho", aseguraba Julián Contreras al contar cómo ha recaído en la depresión.

Julián Contreras también ha confesado que ha tenido que hacer frente a un desahucio debido a su delicada situación económica. "He llegado a estar una semana sin luz, sin agua y sin gas", ha declarado. "He vivido una doble vida para que mi padre no notase nada, por eso viví prácticamente en su casa", ha añadido Julián.

La mala situación económica del hijo de Carmina Ordoñez fue causada por haber dejado dinero a gente que ni conocía. "He podido dejar más de 50.000 euros a gente que ni siquiera conocía. Si los volviese a tener, los volvería a dejar", ha afirmado, y ha añadido: "Confiaba en que me devolverían el dinero hasta que me quedé sin nada".