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Miriam Sánchez reapareció el pasado sábado en el ‘Deluxe’ tras cuatro años alejada de los medios y concedió una de las entrevistas más duras de su vida. La que fuera asesora del amor se armó de valor y explicó el infierno que ha vivido durante los dos últimos años a causa de una depresión, de la que aún está saliendo.
El infierno de Miriam Sánchez empezó en 2015 cuando, tras un tiempo sin aparecer en los medios de comunicación, se vio inmersa en una tremenda depresión. “No me apetecía salir a la calle ni estar con mi familia”, explicó. Se encontraba en un auténtico pozo sin fondo y fue hace un año y medio cuando empezó su recuperación.
El cambio físico no fue el único que experimento Miriam Sánchez durante su etapa más dura. La que fuera colaboradora en Telecinco también rompió una relación de lo más tóxica. Explicó que le hacía “hacer ayunos de tres días” para mantenerse delgada y que ella, como no sabía cortar con él, empezó a sabotear la pareja con rebeldía: “Me rapé la cabeza al cero, me empecé a tatuar y empecé a comer”, explicó.
Las adicciones fueron otro punto importante en la entrevista de Miriam Sánchez. Explicó que en el pasado había tenido “un coqueteo con las drogas” y que estuvo ocho años en terapia. El testimonio era de lo más duro. Decía que había tenido “un par de sustos” y que estaba viva por su genética.
Miriam habló también de la situación económica que vive en la actualidad. Ha habido muchos rumores de si está o no arruinada, ella misma aclaró todo y explicó qué le llevó a subastar por internet sus implantes mamarios.