Es labor de los padres velar para que los niños se relacionen con la tecnología de forma satisfactoria y adecuada. Redes sociales, vídeos, mensajería instantánea, videojuegos, y una cantidad impresionante de información que no siempre es buena está a su alcance con sólo un clic.
Las nuevas tecnologías conviven con nosotros, están presentes en todo momento y nos ofrecen un montón de posibilidades que en muchas ocasiones nos son adecuadas para los más pequeños. En este entorno, los padres se sienten inseguros sobre cómo manejar esta realidad tan atractiva para sus hijos y se crispan a la hora de encontrar el equilibro sin demonizar su uso. Dispositivos como el smartwatch de Xplora ayudan a introducir a los más pequeños en el uso de la tecnología, pero poniendo límites. Se trata de un dispositivo móvil para niños que permite realizar y recibir llamadas y SMS a 12 contactos previamente configurados por los padres. Cuenta con muchísimas más prestaciones: preciso sistema de localización GPS, pantalla táctil, reloj, alarma, juegos... y por supuesto con un sistema que permite establecer franjas horarias en las que no se puede hacer uso de él, como por ejemplo cuando los más pequeños están en el colegio.
Cada vez son más, los especialistas que abogan por hacer de la tecnología una herramienta de aprendizaje y educación. Hay que poner límites en tiempo de exposición y contenido y guiarles para que su relación con ella sea sana y enriquecedora.