La relaciones laborales son complicadas y la legislación vigente tiene muchos flecos. En Ciudad Real, un trabajador ha sido despedido por un conflicto fuera del trabajo y no está claro que este motivo sea correcto.
Todo comienza con dos vigilantes de Ciudad Real, que salen a comer juntos y termina de la peor manera. Los hechos ocurrieron después de comer y fuera del horario laboral, con una ingesta de alcohol de por medio. Golpes, insultos y empujones que dan como resultado un despido y que uno de ellos termine con la muñeca rota.
El trabajador agresor ha recurrido por la vía legal, el despido ante el Tribunal Superior de Justicia, alegando que los hechos no fueron graves y que sucedieron en un bar, fuera de su lugar de trabajo. Pero el Tribunal Superior de Justicia, ha rechazado la apelación, por "romper las reglas de convivencia laboral".
Para Francisco Trujillo, profesor de derechos en el trabajo, esto es un caso excepcional. Normalmente, los despidos son siempre en base a lo que ocurre dentro del lugar de trabajo. "En este caso estoy de acuerdo con la magistrada ya que se rompen varias cosas. Esta agresión con insultos previos, con ofensas verbales y físicas, un consumo de alcohol, perjudica a la imagen de la empresa ya que en el bar había otras empresas y trabajadores".
Verónica Dulanto, planteaba a este profesor otro tema contrario, que por ejemplo, dos trabajadores tengan una relación amorosa fuera del trabajo. Para Francisco, no sería igual ya que no rompe las reglas de convivencia laboral y aseguraba: "Si son compañeros y está todo consentido, no hay problema".