Las exclusivas que nos han dejado atónitos y la amistad más inesperada: los campanazos de 2023, según 'Así es la vida'
Del nacimiento de la nieta de Ana Obregón a la demoledora entrevista de Ángel Cristo Jr.
Para César Muñoz, el "campanzo al mal gusto" podría ganarlo Bigote Arrocet por sus declaraciones sobre María Tereas Campos
José Antonio Avilés ha dado su particular campanazo con su cercanía al Rey emérito
Último programa del año de 'Así es la vida', última entrega de un año que ha estado plagado de noticias impactantes, inesperadas y auténticos campanazos.
La demoledora entrevista de Ángel Cristo Jr.
Nada podía hacer presagiar que la vida de Bárbara Rey se iba a tambalear tanto como lo ha hecho y es que su hijo Ángel Cristo no solo ha contado que su madre le daba somníferos con el biberón, también la acusaba de convertirle en su sirviente y de utilizarle para presuntamente fotografiarle con el rey emérito.
El campanazo de las fotos de Federico de Dinamarca y Genoveva Casanova
Sin duda, fue exclusiva a nivel mundial y es que la portada de la revista 'Lecturas' nos mostró unas fotos de Genoveva Casanova y el heredero al trono danés durante un día de ocio en Madrid.
El campanazo "al mal gusto" de Edmundo Arrocet
Para César Muñoz, "el campanazo al mal gusto" lo ha dado Edmundo Arrocet y es que cree que no puede ser más inoportuno ni tener menos incontinencia verbal dado que el humorista hablaba apenas unos días después de la muerte de la presentadora. Aseguró que la intoxicaron en su contra con “falacias”, que le dejó dinero y que quiso casarse con él para que le quedara una pensión. Este tipo de intimidades además de algún ataque directo dejaban a Carmen Borrego y Terelu Campos atónitas e indignadas.
El campanazo de Ana Obregón
Antonio Casado recordaba que quien nos ha sorprendido a todos ha sido Ana Oregón en lo que él denominaba “abuela por sorpresa”. Eso sí, se mostraba crítico: “Me parece una obregonada”.
El campanazo de José Antonio Avilés
Pero sin duda, el campanazo de José Antonio Avilés ha sido en primera persona y es que el reportero ha conseguido lo que nadie imaginaba. Tras días siguiendo los pasos del Rey emérito en Sanxenxo por tierra y mar, alguien de su equipo de seguridad se dirigió a la prensa y, por sorpresa, le pidió al periodista que le siguiera. ¿Para qué? Para tomar un café con Don Juan Carlos I en el club náutico.