Meritxell saca sus armas de seducción y... ¡¡Alain pierde los nervios!!

Lo que empieza como una sencilla conversación sobre la visita de los familiares el pasado jueves, termina con La pantera a escasos centímetros de un Alain cada vez más saturado. El francés, que no quiere ofender a la que es su mayor apoyo en la casa, solo es capaz de contestar que “por favor, vete a maquillarte o a tomarte un café” con una cara que a punto está de rozar el suelo.