Encuentra información sobre su cáncer en internet pero los médicos la ignoran y muere
Informativos Telecinco
17/06/201514:23 h.El hospital de Nottingham ha dado a la familia de Bronte Doyne una disculpas por no haber prestado "atención suficiente" a lo que decía la joven y admite tener que "entrar en la era digital".
La drmática historia ha sido contada por la familia de la joven fallecida y publicada por el Telegraph y habla de una sintomatología que comenzó en 2011 sin que los médicos diagnosticaran correctamente a Bronte Doyne.
La joven llegó en 2011 a un hospital por la sospecha de que sufría de apendicitis, pero ella tenía una variante muy rara de cáncer de hígado, un carcinoma fibrolameral hepatocelulal.
Bronte Doyne fue diagnosticada y operada. Después de 16 meses de la operación, los médicos le aseguraron que lo habían extirpado completamente y que sobreviviría.
Ella y su familia no le dieron mucha credibilidad a los médicos, porque sabían que existía una probabilidad muy alta de que el cáncer regresara, algo que lamentablemente ocurrió, según ha contado la madre.
"Teníamos información de una web de la Fundación del cáncer fibrolameral en EEUU, que tiene un foro internacional. No era una investigación cualquiera en Google, sino de una fundación seria. Sin embargo, ni siquiera esto ha sido considerado por los médicos británicos que la atendieron, que nos han desalentado diciendo que dejáramos de buscar en Google", ha explicado la mujer afectada por la pérdida de su hija.
"Cuando le preguntamos si existía la posibilidad de que el cáncer regresara, nos dijeron que nuestras preocupaciones no habrían ayudado a la chica".
Sin embargo, los tuits y los mensajes a sus amigos, revelan las preocupaciones de Bronte Doyne, que seguía sintiéndose mal, a pesar de lo que le aseguraban los médicos.
Sentía que su cuerpo no le respondía y que sus preocupaciones no eran escuchadas, solo le hacía caso su familia.
Seis semanas antes de morir, Doyne volvió al hospital por un empeoramiento de sus síntomas, pero un médico le dijo que no había ninguna necesidad de ser examinada.
En uno de los mensajes tras esa cita con el médico, la joven escribió: "Tengo miedo. El médico ha encogido los hombros y ha hecho un comentario sarcástico: Me ha dicho que si quiero puedo dormir en el hospital, pero que ellos no pueden hacer nada por mí. Así que me toca esperar la próxima visita al hospital".
Solo 10 días antes de morir, Doyne fue ingresada en una sección oncológica para jóvenes.