El enfado de Ramos con una fotógrafa: "No te voy a tocar, pero has dado con el peor"

Todo sucedió el miércoles 2 de julio en Zahara de los Atunes, durante las vacaciones de Sergio Ramos. El futbolista salía de un restaurante tras una cena junto a Pilar Rubio, su pareja, y su hermana. Era entonces cuando una fotógrafa les captaba por sorpresa. En la imagen se ve cómo el futbolista pide que no se le fotografía y, segundos después, comienza una tensa conversación entre ellos.

"Enséñame la foto que has hecho", le decía el futbolista, "pero bueno, que no pasa nada, te he pedido una foto y ya está", replicaba la fotógrafa; "sí, pero la pides y me pongo para que me hagas la foto. Tampoco es para que me hagas una foto en toda mi cara ¿no?", respondía él. Poco después también intervenía Pilar Rubio: "Esta mujer te está buscando un problema, no se puede ir así por la vida", le decía.

"¿No vas a borrarla?", preguntaba Ramos, ella negaba y tras unos segundos, la fotógrafa decía: "Te denuncio por... me ha dado un manotazo ¡Andrés! Me ha dado un manotazo", sin embargo, él negaba haberelo hecho: "No te voy a tocar" le decía, Pilar Rubio le daba la razón e intervenía: "A lo mejor el manotazo te lo doy yo, que yo sí te lo puedo dar (...) Pero tengo más educación que tú y no te voy a tocar".

Ambos parecían dispuestos a llamar a la guardia civil, también intervenía el amigo de la fotógrafa y Sergio Ramos decía: "Pero que a mí no me va a dar el día de vacaciones la gorda esta. Es la típica 'zumbá' que no está buena de la cabeza y viene a complicar la vida".

Kiko M. afirma que la fotógrafa provocó a Ramos en el interior del restaurante

Tras ver esta secuencia, Kiko Matamoros explicaba que el vídeo ha sido editado por la fotógrafa y está "cortado". Añadía que todo comenzó no en ese momento, sino en el interior del restaurante donde la chica habría captado otras imágenes: "Ella se metió dentro del restaurante y le tiró tres fotos a un señor que estaba con su madre y con su mujer. Sergio le dijo 'oye ya está bien, vete por favor".

El colaborador añadía que alguien le dijo a la fotógrafa que la pareja saldría por la puerta de atrás. Fue entonces cuando les fotografió de nuevo y se produjo el altercado: "Le puso la cámara en la cara, esa es la provocación". Matamoros añadía que no fue ella sino el futbolista quien llamó a la Guardia Civil y concluía: "Luego se quedó la cosa en agua de borrajas".

Pero minutos después, Matamoros afirmaba que existe otro testimonio en contra de la versión de la fotógrafa y se trataría de Andrés, el amigo al que ella alude durante el vídeo: "Dice que es todo una manipulación y que está dispuesto a testificar donde haga falta".