Isabel Pantoja atraviesa uno de sus peores momentos personales. El distanciamiento con su hija tiene a la tonadillera triste, tan triste que ha buscado desahogo en los periodistas. Después de sus duras palabras en la estación del AVE, la tonadillera se ha sincerado con Beatriz Cortázar y Paloma Barrientos en su camerino después de su concierto en Aranjuez. "Yo dejé a mi hija para trabajar no para operarme el pecho", les ha dicho la artista, que está muy afectada por esta complicada situación familiar.