Rocío Flores comunica en 'El programa de Ana Rosa' que definitivamente se ha quitado la faja que llevaba tras la lipoescultura realizada en marzo. La colaboradora explica al detalle cómo se encuentra y qué utensilios sigue llevando.
La hija de Antonio David se sometió a la intervención quirúrgica junto a Olga Moreno. De hecho, en la última aparición de Rocío Flores en el programa mostró la faja que ha tenido que llevar durante mes y medio. Unas imágenes que reflejaban el hinchazón y la aparatosidad de la operación.
La colaboradora explica que "ya me he quitado la faja del cuerpo entero, ahora llevo dos tubulares y una tabla de corcho...". Además, Rocío confiesa que no tiene "ni idea de cuánto tiempo me queda" y desvela la recomendación del médico: "Me ha dicho que cuanto más tiempo lleve la tabla y los tubulares, mejor para marcar la cadera".
"El resultado de este tipo de operación se empieza a ver a partir de los 3-6 meses y el resultado final al año. Ahora mismo veo resultados, pero los definitivos no los voy a ver, todavía tengo inflamación", cuenta la colaboradora.
Una situación incómoda para Rocío puesto que no puede sentarse debido la tabla que lleva en el torso: "En casa como de pie y cuando voy a restaurantes como medio tumbada". Por otro lado, quiere dejar claro que "es una operación que duele, los 10 primeros días son bastantes dolorosos".
Por último, Rocío Flores explica que "no tengo la piel muy flácida, pero tengo que coger musculatura" y anuncia ante la audiencia que no hará un posado en bikini: "Lo desmentí al segundo".