La desaparición de Manuela Chavero en Monesterio, un pueblo de Badajoz, lleva sin resolverse después de cuatro años. Como si se la hubiese tragado la tierra, nadie volvió a verla tras desaparecer en su casa dejando la puerta de la vivienda abierta y dejando la luz y la televisión encendida. Ahora, con la casa intacta durante este tiempo, la Guardia Civil ha vuelto al lugar de los hechos dos años después.
La familia de Manuela Chavero confiesa que "esto es algo esperanzador". Los agentes han acudido a las 09.30 horas de la mañana, con miembros de criminalística, poniendo un biombo gigante que oculta la entrada al domicilio donde desapareció la joven. La reportera explica todos los detalles: "Han realizado una inspección ocular en el interior de la vivienda, luego han salido al exterior a realizar grabaciones y mediciones y ahora han vuelto al interior de la casa".
La periodista Cruz Morcillo da más datos sobre la extraña desaparición: "Se fue con lo puesto o se la llevan y hasta hoy. Manuela había quedado al día siguiente con su hermana para intercambiar ropa y luego con una amiga en Zafra para hacer unas gestiones. Al ver que no iba, dieron la voz de alarma".
Además, la periodista explica que "si vuelven es por algo, hay un sospechoso y no sabemos si va a llegar esto a buen puerto porque no hay escenario de crimen, nunca apareció nada de Manuela". Además, añade que "la Guardia Civil llamó a los familiares para pedir permiso al registro, han habido varios sospechosos pero dos o tres en el foco, uno fue su exmarido, un chico con el que se estaba whatsapeando antes de desaparecer a las 01.55 horas de la mañana".