Fueron cuatro veces las que tuvo que avisar Carlos de que su pareja amenazaba con secuestrar a su hija, algo por lo que el juez acabo pidiéndole disculpas por la negligencia en su caso. Fue en 2016 cuando se produce este secuestro, y a pesar de tener la patria potestad y la custodia, sigue sin ver a su hija.
Fue gracias a los servicios de un detective privado, que tras un año dio con la niña, la cual se encontraba con su madre en el país natal de esta, Kirguistán, a unos 8000 kilómetros de España. “Desde entonces estoy emprendiendo una lucha destinada en recuperar a mi hija y a traerla de vuelta a casa”, dice Carlos, el cual sube videos donde le habla a su hija con la esperanza de que esta los vea.
Tras un intento de traerla de vuelta, fueron interceptados en la frontera del país, y la niña fue devuelta a su madre de inmediato. La madre tiene una orden de busca y captura, la cual caducará en 2022. “Ella se va a Kirguistán, en primer lugar porque está su familia, y en segundo lugar, porque sabe que su estado la va a proteger”, dice Carlos, el cual habla con impotencia de esta situación, y que no descartaría denunciar a la justicia española por la negligencia en su caso.