El propietario del taller quemado en Carabanchel, sobre el negocio: "Es legal, les vendo máquinas y hago facturas al nombre de su empresa"

  • "Todo es legal, yo le vendo máquinas y les facturo, les hago las facturas al nombre de su empresa"

  • Sobre trabajadores ilegales: "Lo vi por televisión y no sé más porque con mis clientes no hablo de esas cosas. Mientras me paguen..."

  • "Ellos son unas personas normales y corrientes", dice sobre los trabajadores de la empresa

'El programa del verano' se desplaza hasta Carabanchel donde se ha producido un incendio en un taller clandestino. El reportero acude al lugar de los hechos y habla con el propietario del establecimiento que cuenta todos los detalles del negocio.

Rafael es la persona que montó el taller de Carabanchel donde se produjeron los hechos: "Efectivamente, yo he sido el que lo ha montado y le he vendido las máquinas". Después, el propietario explica que "fue hace como un año, empezó poco a poco, fue tirando para arriba, aumentando maquinaria y de todo".

El entrevistado cuenta que el taller que ha salido ardiendo en Carabanchel se encuentra en la primera planta y que allí "se hace ropa de vestir, de uniformes y de todo". Luego, el reportero pregunta: "¿Había muchas personas trabajando allí?". Rafael contesta: "Pues no sé ahora mismo las personas porque últimamente venía mi mecánico, yo no vengo".

"Aquí todo es legal, vendo las máquinas y hago las facturas con su empresa"

En el suceso, la policía ha detenido a tres jóvenes que han aparecido desnudos y quemados. El propietario del taller confiesa: "Ellos son unas personas normales y corrientes". Después, Rafael desmiente los rumores que apuntan a que era un negocio ilegal: "Todo es legal, yo le vendo máquinas y les facturo, les hago las facturas al nombre de su empresa".

El entrevistado reconoce que el que acudía con las máquinas al taller era su mecánico: "Algunas veces vengo yo, pero últimamente el que viene es mi mecánico". El periodista, para aclarar la información, pregunta sobre los detenidos que hubo en el taller hace unos meses por existencia de trabajadores ilegales. Rafael es muy sincero: "No te puedo decir nada, lo vi por televisión y no sé más porque con mis clientes no hablo de esas cosas. Mientras me paguen, no hablo de esas cosas".

Por último, tras el terrible incendio que parece haber destrozado el local completo, Rafael añade: "La compañía se tiene que hacer algo, yo no. El otro día trajimos una maquinaria que cuesta 20.000 euros y eso está sin cobrar...".