El joven al que abandonaron en una cuneta con la mandíbula rota: "Volvieron para estrangularlo con una cadena"

  • El padre del menor que recibió la paliza en Conil de la Frontera explica cómo está su hijo

  • "Un grupo de 20 chavales le dio una paliza a mi hijo con palos, muletas y piedras... si mi hijo llega a perder el conocimiento, lo habrían matado"

  • "Lo dejaron semi inconsciente, después volvieron, lo tiraron a la cuneta, lo incorporaron, le clavaron la rodilla en la espalda y lo estrangularon con una cadena"

'El programa del verano' entrevista al padre del chico al que un grupo de jóvenes le fracturaron la mandíbula, estrangularon y lo dejaron tirado en una cuneta de Conil de la Frontera. El familiar cuenta todos los detalles de la brutal paliza que recibió su hijo.

El padre de la víctima explica el estado de su hijo tras fracturarle la mandíbula: "Ahora tiene un periodo de recuperación de 40 días, está comiendo con una pajita, tiene unas placas de hierro unidas por unas gomas para que la mandíbula vuelva a su sitio. En lo físico se recuperará, en lo psicológico tardará mucho tiempo en recuperarse".

La brutal agresión: el origen y la agresividad de la paliza

"Mis hijos me cuentan que en un momento de la noche se acerca un grupo de chavales a empujarles e increparlos, hablan con ellos para que quede todo en eso. De hecho, uno de ellos le dice que no haga caso a su amigo, que está muy drogado, muy pasado y que se le va la cabeza. Luego hablan de dónde son cada cual, que unos eran de Rivas Vaciamadrid y los demás de Conil, uno se llamaba Adrián y otro David, una conversación normal y quedó ahí", dice el padre sobre el origen del conflicto.

"A la salida de la discoteca, la sorpresa es que hay un grupo de 15-20 chavales que les esperan, salen corriendo detrás de ellos, gritando que los van a matar y que son ellos. Van con palos, uno va con una piedra agarrada con las dos manos que intenta golpear a mi hijo Marcos en la cabeza", confiesa el entrevistado.

El grupo de los amigos de sus hijos "intentan repeler la pelea, pero como son muchos y le están dando con palos, muletas, pues salen corriendo". Sin embargo, aquí llegó el momento trágico: "Al correr, tienen la mala suerte de que uno de ellos se cae, mi hijo retrocede para levantarlo y ayudarlo para que no le cojan... el amigo consigue escapar y desgraciadamente a mi hijo lo cogen".

"Le pegan a mi hijo con palos, muleta y piedras... no había manera humana de escaparse. De hecho, agentes de la Guardia Civil me dicen que si mi hijo llega a perder el conocimiento, lo habrían matado", dice el padre roto por la tremenda agresión que el chico ha recibido.

Tras la paliza, el grupo volvió a la cuneta para estrangular al joven

El padre de la víctima resalta la gravedad del asunto y destaca el intento de asesinato: "Hay un matiz que no se debe de obviar, a Marcos cuando lo dejan semi inconsciente en una cuneta, él se cree que ya se han cansado, él me comenta que no veía nada, estaba agotado y que no podía más. Se sienta en una piedra, ve que vuelve gente y no se cree que sea otro grupo de estos energúmenos".

"En ese momento lo tiran a la cuneta, queda tumbado bocarriba, empiezan a apedrearle, me dice que lo incorporan, le clavan la rodilla en la espalda, le ponen una cadena en el cuello e intentan estrangularle. Regresan para rematarlo", dice el padre sin dar crédito. Patricia Pardo, al escuchar el relato, sentencia: "No tiene ninguna posibilidad de defensa, estás a tu suerte en el suelo, esto es una tentativa de asesinato".

El padre explica que entre los autores de la paliza "hay un detenido de 16 años, en la pelea hubo implicados entre 14 - 20 desarmados". Luego, dice sobre el menor: "El chaval de 16 años, que jugaba en el Sevilla FC, que es muy valiente con todos sus amigos alrededor, ha sido detenido y ahora tendrá que identificar a sus amiguetes de fechorías".

"La Guardia Civil me ha dicho que hace poco quemaron la bandera del Orgullo en el ayuntamiento de Conil, se divierten haciendo estas cosas... luego son muy buenos para sus padres, pues a mi hijo lo han intentado matar esa banda de desarmados", dice el padre sin ningún tipo de compasión con los autores del intento de homicidio.