La declaración de la viuda negra ante el juez: un testimonio marcado por las contradicciones

  • Conchi, sospechosa de matar a José Luis, explica por qué iba de negro y llevaba guantes y gorro en pleno mes de agosto

  • La viuda negra confiesa que su marido culpó a su hijo del crimen: "Me dijo 'me la ha clavado en el corazón"

  • La acusada declaró por qué había acudido al parking junto a Francisco

La viuda negra ha declarado ante el juez todo lo que ella recuerda del momento en el que murió José Luis, el que fuese su marido. Con numerosas contradicciones en su discurso, Conchi, principal sospechosa del crimen, se juega pasar sus próximos 30 años en prisión. Ahora, tras la reconstrucción del crimen, sale a relucir la verdad de lo ocurrido.

Hace dos años Conchi fingía no poder andar tras el crimen de su marido José Luis, solamente 15 días después de casarse. También está implicado Paco, su cuidador y podría ser el cómplice del asesinato. La víctima recibió 20 puñaladas con un destornillador y ahora la sospechosa cuenta su verdad.

Declaraciones

Conchi ha explicado por qué acudieron al parking donde se realizó el suceso: "Íbamos a cenar, íbamos a estar un ratito allí viendo la luna y estrellas, el tiempo que yo pudiera aguantar". Luego, confesó que ella había sufrido varios abortos y que acudía a ese lugar para tirar unas flores al mar.

Cochi y Paco iban vestidos de negro, incluso ella llevaba gorro y guantes en pleno mes de agosto. La acusada se defiende: "Llevaba el gorro para que el pelo no se me bufara por el mar y los guantes para que no se me enfriaran las manos de la humedad".

"Nosotros llegamos, estaba Francisco ayudándome para sacarme coche, fue a coger la silla de ruedas del maletero y ya no regresó, le oí gritando 'socorro' y 'auxilio". Luego, la viuda negra declara: "Como pude me impulsé y me fui arrastrando".

Conchi señala al hijo de José Luis, pues según ella la víctima llegó a decirle que "mi hijo me la ha clavado en el corazón". Eso sí, la sospechosa número uno no se percató de cómo era el sospechoso: "Ojalá pudiera recordar la cara".

Contradicciones en el testimonio

La sospecho es acusada de matar a su marido con 20 puñaladas con destornillador. La que fingiese no andar y ahora sí puede, cambia también su versión sobre su supuesta tetraplejia en el pesado y unos dolores en las cervicales.

Por otro lado, Conchi explicó que acudió al parking para ver el mar y "lanzar unas flores al mar". Sin embargo, nunca se encontraron dichas flores en el vehículo. Ella, bajo presión, dice que sufrieron un "pinchazo" y no pudieron llevarlas.

La viuda negra siempre ha reconocido que nunca llamó a José Luis antes del asesinato, aunque se han registrado numerosas llamadas en el registro del teléfono. Además, Conchi confesó que no entendía lo que decía José Luis mientras moría y que solo le decía: "Amor, tranquilo, que ya viene la ayuda". Pero la mentira volvió a salir a la luz cuando contó que su expareja le había dicho que el culpable era su hijo: "Me lo ha clavado en el corazón".