Los vecinos de Albalate de Zorita, atemorizados por un matrimonio

  • Los vecinos se quejan de las amenazas, robos y agresiones de este matrimonio

Albalate de Zorita, en Guadalajara, es noticia debido a que lo vecinos no aguantan más la situación de un matrimonio. Según los vecinos, este matrimonio se dedica a hacer la vida imposible al resto de vecinos, con robos, amenazas y agresiones. “No hacen nada, se dedican a trapichear, además se auto agreden para denunciar a los vecinos”, comenta un vecino, el cual sufrió una agresión, cuando mientras que discutía con ellos, le dieron con un palo de golf en la cabeza. Según un vecino, su ‘modus operandi’ es provocar para que entres en su juego y luego denunciarte para sacarte el dinero.

La misma noche en la que este vecino fue agredido, este matrimonio prendió fuego a la puerta de su casa y su coche y la Guardia Civil comprobó que se había quemado desde dentro. Tras este suceso, no se ha vuelto a ver a este matrimonio. La madre de se ha puesto del lado de los vecinos del pueblo, pero a su vez su hija ha decidido repudiar de ella y evitar que pueda ver a sus nietos. “Yo he llegado a pasar por delante de mis nietos y llegar a escupir cuando me han visto”. Este matrimonio ya ha ganado varias trifulcas judiciales a varios vecinos, los cuales se han quejado de que solo quieren su dinero y se inventan agresiones. Por todo esto, los vecinos lo que quieren es que abandonen el pueblo para que así puedan vivir tranquilos.

"Empezaron a insultarme y cuando les pregunté me golpearon con un palo de golf"

Jorge, uno de los vecinos agredidos por la pareja de Albalate de Zorita ha contado cómo la pareja le abordó y le golpearon con un palo de golf en la frente, provocándole una herida que tuvo que ser cerrada con varios puntos. “Iba tranquilamente en el coche cuando empezaron a amenazarme e insultarme”, dice. Explica que al bajarse para pedirle explicaciones, el hombre se abalanzó sobre él y terminó provocándole la herida. El matrimonio ha tenido conflictos también con el juez de paz y el cura del pueblo.