Si quedaba alguna duda de lo que siente Piqué cuando se pone la camiseta de España, ha quedado totalmente despejada tras el debut de La Roja en la Eurocopa. Primero con su gol en el minuto 86 y, después, paseando a su hijo Milán por las inmediaciones del estadio y con la camiseta de España puesta, el central del Barça ha vivido una tarde de auténtica reconciliación con la afición española.