"Es lo que hay, ¿qué le vamos a hacer? Yo creo que es un poco joven, pero si ella es feliz eso es lo más importante". Esas fueron las primeras palabras que dijo Alejandro Rubio, padre de Alejandra Rubio y exmarido de Terelu Campos, cuando descubrió que su hija estaba embarazada y esperaba un bebé junto a Carlo Costanzia. El niño, que se ha llamado Carlo en honor a su padre, nació hace tres meses y ha sido ahora cuando se han publicado las primeras imágenes del feliz abuelo junto su hija y su yerno, el bebé y su nueva novia.

Las ha publicado la revista 'Lecturas': en ellas se puede ver que Alejandra y Carlo acudieron al domicilio de Alejandro - que tiene otro nieto por parte de su hijo mayor, un joven treintañero llamado Sergio nacido de una relación anterior a la de Terelu - para que pasase tiempo con el bebé. En esas imágenes se puede ver a una mujer rubia que se deshace en atenciones con el bebé y que la publicación afirma que es la pareja del empresario.

Esta sería la tercera pareja conocida del padre de Alejandra Rubio, que se casó por primera vez con la ahora aspirante a concursante de 'Supervivientes 2025' en 1998 en una ceremonia civil en el Real Palacio de la Magdalena en Santander un año después de conocerse. Su matrimonio se rompió cinco años después pero siempre mantuvieron una buena relación por el bien de su hija en común, a la que ambos adoran y que ahora les ha dado un nieto.

Años después, rehízo su vida al lado de una mujer llamada Beatriz que falleció en 2017 a los 37 años a causa de un cáncer. Un duro golpe para el empresario, pero también para Terelu y para Alejandra - que en ese momento era una adolescente de 17 años -, que adoraban a Beatriz. De hecho, la colaboradora de 'Vamos a ver' se tatuó el nombre de su madrastra en la nuca para recordarla siempre. "La pérdida de Bea fue dura. Me volví loca. Me hice rebelde, no sabía por dónde tirar", contó la joven de 24 años en una visita a 'Volverte a ver'.

En 'Lecturas' no dan más detalles acerca de la nueva novia de Alejandro Rubio, pero sí que comparten una foto del empresario abrazando a Carlo Costanzia, que demuestra la buena relación que existe entre suegro y yerno.