Gastronomía

¿Cuál es el queso más caro de España y qué precio tiene?

quesos pexels
El queso más caro del mundo es español. Pexels
Compartir

Los gustos de cada persona son únicos, pero suele haber cierto consenso con respecto al queso, es un producto que, en general, gusta y gusta mucho. Esto no quiere decir que a todo el mundo le gusten todos los quesos o que hay un queso que guste a todo el mundo, pero hay tantos tipos, tantas opciones y tan diferentes, que es raro que ninguno sea de nuestro agrado. 

De los quesos frescos a los más curados, suaves de sabor o de una intensidad tal que casi obliga a tomarlos acompañados de un pedazo de pan o un poco de fruta para reducirla un poco. Hay quesos para todos los gustos y una infinidad de formas de disfrutarlo, porque aunque lo más habitual sea tomarlo como un aperitivo, no es raro encontrarlo en preparaciones como ensaladas, salsas, espolvoreado sobre la pasta o como ingrediente clave en un delicioso postre. 

PUEDE INTERESARTE

Es complicado que ninguno de los quesos existentes sea del agrado del comensal (aunque no podemos evitar señalar que podría darse el caso, hay personas a las que no le gusta el queso y hay que respetarlo, aunque escape a nuestro entendimiento). Solo en España hay más de 150 tipos, 26 quesos con Denominación de Origen Protegida (DOP) y 3 Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP). 

Bien se podría decir que España es tierra de quesos, aunque lo cierto es que es complicado seleccionar solo un elemento de su gastronomía para poder definirla. Hay quesos para todos los paladares, pero también para todos los bolsillos, desde los que se pueden comprar en cualquier supermercado y son más que aceptables a aquellos que alcanzan cifras sorprendentes en subastas. ¿Cuánto ha costado el queso más caro de España?

PUEDE INTERESARTE

El queso más caro de España y su precio 

Hay países que tienen quesos que merecen mucho la pena y España es uno de ellos, tanto es así que el queso más caro del mundo es español. Durante el 52º Certamen del Queso de Cabrales celebrado en Cabrales (Asturias) una pieza de queso ha alcanzado en subasta la nada desdeñable cifra de 36.000 euros (la puja comenzó con 3.000 euros y comenzó a ascender rápidamente), alcanzando un nuevo Récord Guinness. 

Es un queso de Cabrales de 2,3 kilos, madurado en una cueva natural de Los Mazos durante diez meses. Fue elaborado por la fábrica Ángel Díaz Herrero.

El Cabrales es un queso de tipo azul con denominación de origen protegida. Para poder ser considerado como tal no solo tiene que estar elaborado en Asturias, tiene que estar hecho en el concejo de Cabrales, o en alguno de los tres pueblos limítrofes que también tienen la suerte de pertenecer a esta denominación. 

Es un queso natural que elaboran los propios ganaderos con leche cruda de vaca o con mezcla de varios tipos de leche: vaca, oveja y cabra. En función de la leche escogida, el sabor será diferente, por ejemplo, es ligeramente picante, más acusado cuando está hecho con leche de cabra y oveja pura o en mezcla.

Una vez que el queso ha sido elaborado, comienza la siguiente etapa, indispensable para ser considerado como un queso de Cabrales con Denominación de Origen. Así, una vez que está el queso, se procede a su maduración, que debe ser en unas condiciones concretas

Igual que sucede con el queso ganador de la subasta, un queso de Cabrales tiene que madurar en cuevas naturales por un periodo de tiempo no inferior a dos meses. Lo más habitual es que sea durante un tiempo de entre dos y cuatro meses. Las condiciones ambientales de las cuevas, con una humedad del 90% y una temperatura que oscila entre los 8 y los 12 °C, convierten a este queso en lo que es. 

Solo en estas condiciones se favorece el desarrollo de mohos del tipo penicillium en el queso que, tal y como recogen en la página web oficial del Consejo Regulador D.O.P. Cabrales, “aporta las zonas y vetas de color azul-verdoso”. Solo los quesos que están elaborados siguiendo estas pautas son reconocidos como D.O.P. Cabrales, y son solo ellos los que se envasan y etiquetan como tal, lo que hace más sencillo reconocerlos y saber que lo que nos llevamos a casa es lo que estamos buscando y no algo que se le parezca. 

Los quesos oficiales, una vez que ya están listos para su consumo, son envueltos en papel de aluminio de color verde. Además, siempre llevan la etiqueta del fabricante y la contraetiqueta del Consejo Regulador, que es fácilmente reconocible porque tiene una banda roja flanqueada por dos bandas verdes y el logotipo oficial con la numeración correspondiente. Una forma sencilla de saber que no se trata de un queso fraudulento y sin garantías, sino de uno de los mejores quesos del país.