Dónde comer las mejores gildas en Madrid
Se cree que el origen de este pintxo está en el San Sebastián de los años 40
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Una de las cosas más interesantes que te puede suceder si eres amante de la gastronomía es que te inviten a descubrir un plato nuevo, si además se convierte en el bocado de moda, mejor todavía. Esto es lo que ha pasado con las gildas, un pintxo tradicional que ha sabido tras pasar fronteras, seduciendo a propios y extraños con su toque picante y su atrevido sabor.
Cada vez son más los lugares que han caído rendidos a sus encantos y las incluyen en sus cartas. Una opción refrescante, saludable y ligera que no es apta para todo el mundo, por la combinación de ácidos y salados, pero que los amantes de los encurtidos encuentran irresistible. Cada uno de sus ingredientes encaja a la perfección, aportando algo diferente y consiguiendo el equilibrio con el resto. Un pintxo sencillo, pero que convence.
La receta es sencilla, solo hay que ensartar en un palillo una aceituna, una piparra (que es un tipo de guindilla vede de picor suave que se emplea bastante en el País Vasco y el norte de la Península) y una anchoa, la calidad de las materias primas es lo que la convierte en algo memorable. Tres ingredientes que encajan a la perfección, creando una explosión de sabores en la boca de quien las come, porque potencia el sabor salado de la anchoa, el picante de la guindilla y todo se suaviza con la frescura de la aceituna, encajando a la perfección.
Esta es la receta tradicional, pero con el paso del tiempo se ha ido modificando ligeramente, sobre todo incorporando otros ingredientes, que se suman a la base indiscutible que son estos tres, convertidos en la esencia de la gilda. En algunos lugares suman un boquerón en vinagre, en otros incorporan un huevo de codorniz o incluso un poco de queso, aunque ninguna de estas recetas sería la original.
Se cree que el origen de este pintxo está en el San Sebastián de los años 40, concretamente en Casa Vallés, y se llama así como homenaje a la película del mismo nombre protagonizada por Rita Hayworth, un guiño a uno de sus personajes más memorables porque se dice que comparten características, ambos son “verdes, salados y un poco picantes”.
Dónde comer las mejores gildas en Madrid
Era cuestión de tiempo que a la gilda se le quedara pequeño el espacio en el que había estado creciendo y se fuera extendiendo por distintos lugares de la Península, tanto es así que es posible comer en Madrid algunas de mucha calidad y que nada tienen que envidiar a las originales. La clave está en la calidad de los ingredientes, pero también en el cariño de quien las prepara, siempre pensando en ofrecer lo mejor al cliente.
- Hermanos Vinagre. Tienen tres locales en la capital y apuestan por la receta clásica de gildas, aunque estas vienen bien cargadas. El bocado perfecto para acompañar tus bebidas, ideal para matar el gusanillo o para abrir el apetito.
- Castizo. Con este nombre parecía poco probable que este bar dejara que las gildas entraran en su carta, pero además de castizos, son cosmopolitas y no le dicen que no a una buena receta. Además de sus gildas, también su gazpacho merece la pena, así como sus mejillones en vinagreta o su tortilla de patatas.
- Doble y gilda. La combinación ganadora da nombre a este local, que no solo tiene las mejores gildas tradicionales, sino que también apuesta por algunas versiones diferentes que prometen seducir a quien las prueba. Tienen gildas de pulpo, vegetales o con mejillones, ¿te atreves a probarlas todas? Además, también es tienda, por si te apetece llevarte unas pocas a casa para seguir comiendo.
- La Consentida de Doré. Han convertido las gildas en su pasión y no dejan de cerrar combinaciones nuevas que exploten todo su potencial. Con bacalao, con huevo de codorniz, incluso tienen opciones veganas… Puedes escoger las que más te apetezcan desde su barra a pie de calle.
- Variantes Marga. En el mercado de La Cebada está este local, que es perfecto para los amantes de los encurtidos, porque además de las prometidas gildas, tiene muchos más productos que harán las delicias de los más exigentes.
- La Gildería. Cuentan con un local en el barrio de La Latina y otro en Chamberí y en ambos tienes la opción de probar su plato estrella, las gildas. Un lugar ideal para tomar un buen aperitivo en la mejor compañía. No admite reservas, así que cuando vayas cruza los dedos para poder encontrar la mesa perfecta para probar sus gildas de arenque.
Opciones muy variadas que prometen la posibilidad de disfrutar de las mejores gildas de la capital, respetando la esencia de este pintxo, pero también actualizando su receta con versiones que prometen convencer. Para todos los gustos, desde los más tradicionales a los más sibaritas, sin olvidar a los alternativos que siempre buscan darle una vuelta de tuerca.