Kiko e Irene no han tenido ningún momento de intimidad en el concurso y el DJ le ha propuesto a su mujer, Irene Rosales, pedir una hora sin cámaras para pasarla juntos. “Gordi, el público lo quiere”, le ha dicho. Ella tiene muy clara la respuesta, al igual que sabe perfectamente lo que va a hacer en cuanto salga de la casa de Guadalix.