Según la RAE, un intercambio se define como la "reciprocidad e igualdad de consideraciones y servicios entre entidades análogas de diversos países o del mismo país". Según Guadalix, un intercambio tiene más que ver con movimientos sospechosos con una o varias partes del cuerpo bajo el edredón.
Saray y Natalie han hecho buenas migas. Partiendo de las dos premisas que el programa puso a los concursantes ("les haréis sentirse felices y les enseñaréis a sus invitados algunos aspectos de nuestra cultura"), la gallega ha querido además seguir indagando en la idiosincrasia del ahijado del jefe de la tribu, comenzando tímidamente por el sentido del tacto.
El interrogatorio de Tatiana
Tatiana le ha ayudado, haciéndole un tercer grado a Natalis sobre las costumbres de reproducción y enlace de los Ndani. El joven ha contado que para casarse tienen que pedírselo al padre de ella, que hay que darle cerdos y que el número de los mismos depende de la corrección de la muchacha, es decir, de si es bella, trabajadora y limpia. De todas-todas, el máximo número de cerdos son 5.
Tatiana les ha cortado para reivindicar que ella, como joven casadiza y maciza, cree valer "muchos más cerdos". Natalis se ha limitado a negar con la cabeza, algo que ha sido interpretado entre risas. Los rostos serios han llegado cuando Natalis ha explicado, sin alardes emotivos, cómo se le murió una hija.
Tras una transición y ya de vuelta al sentido del humor, Saray ha subido decibelios: "ha confesado la rubia del norte. Gerardo, echándole un capote a Natalis, ha puesto la puntilla: "Jo, tías, parecéis unas salidas. Sólo le preguntáis de eso".
Yo todavía no sé como meten el ciruelo y el huevo ahí",