'El Clan Mirentxu'

CELIA MOLINA 06/10/2008 12:35

Mirentxu entró en la casa de 'Gran Hermano' con una alegría y un desparpajo que sorprendieron a todo el mundo. En los primeros días de convivencia era una especie de 'abuela enrollada', el tipo de abuela que a todos nos gustaría tener: divertida, moderna, descarada y con las feromonas disparadas. Ese 'buen rollo' le hizo congeniar muy bien con algunos de los habitantes de la casa como Ana, que empezó a contarle a la donodtiarra sus los problemas personales que le acarrea su alocado carácter. También hizo muy buenas migas con Li ,Julito, Almudena y Palomares y con ellos se comporta como la 'mami' de la casa porque , con la edad que tiene, supera en experiencia y picardía a los jovencitos de los que se ha rodeado. Ellos, perdidos y flexibles, están encantados de que haya alguien que les escuche, que les prepare la comida y que marque el ritmo de la casa mientras todos se divierten.

La primera de las concursantes que empezó a tener problemas con el rol de 'sargento' de Mirentxu fue Eva, la última gran hermana expulsada, que en más de una ocasión se ha burlado de las manías de la donostiarra. "¡Cómo grita esta chica!" se quejaba Mirentxu, que tampoco congeniaba nada bien con el carácter de la ganadera. Pero con quien más problemas ha tenido 'la abuela' dentro la casa ha sido con Iván, su peor enemigo dentro del programa y el cabecilla del otro grupo de la casa, que no soporta que Miretxu quiera organizar las cosas a su manera porque "no es bueno para la convivencia".

Dormir, el gran dilema de Mirentxu

En la primera noche de programa, Mirentxu ya pudo darse cuanta de la que se le venía encima: 15 chicos y chicas jóvenes con muchas ganas de juerga. Conciliar el sueño está siendo un gran problema para ella porque 'los chicos' hacen mucho ruido hasta altas horas de la mañana. Ese cansancio provocó la primera pelea seria de la casa entre Mirentxu e Iván. La donostiarra acusó al modelo de reírse demasiado alto y no dejarla descansar. Mirentxu advirtió que por las noches todos hacen demasiado ruido, sabiendo que las luces no se apagan hasta que todo el mundo está acostado. Mirentxu trató de explicarle a Iván su situación, pero éste no reaccionó nada bien. "Ella ronca mucho por las noches y nadie le dice nada. Esto es una conveniencia y hay que ser más tolerantes, lo que pasa es que Mirentxu es una mujer muy mandona". La discusión no terminó nada bien y Mirentxu entró inmediatamente en el confesionario para desahogarse. "Me esta poniendo este chico...porque yo comprendo que son jóvenes y tienen que pasárselo bien pero también conozco jóvenes que saben divertirse y también dormir".

A la lucha por el descanso se unió Ana Toro, la concursante que mejor ha congeniado con Mirentxu. Ella también comenzó a quejarse del exceso de ruido por las noches y ya se sabe que la unión hace la fuerza. Ana y la donostiarra empezaron a desaghogarse juntas sobre el tema, aludiendo a la falta de educación de algunos compañeros de la casa. " La gente no tiene educación. Me voy a poner yo a chillar en su cara, verás como no les gusta", se quejaba Ana, y Mirentxu terminó llorando de la impotencia. El 'Clan Mirentxu' se hizo más fuerte y empezó a mirar con malos ojos a Iván y sus amigas, Loli y Raquel y esto tuvo graves consecuencias en las últimas nominaciones.

¿Pacto en las nominaciones?

Como bien apunta 'El gato encerrado' es mucha casualidad que la mayoría de los amigos de Mirentxu nominaran exactamente de la misma forma en la última gala de 'Gran Hermano'. Tanto ella como Ana, Julito, Almudena y Li nominaron a Raquel e Iván, la parejita emergente de la casa. Palomares y Gisela despuntaron un poco y son los dos concursantes que podríamos denominar como "más neutrales".

Todos se quedaron bastante compungidos cuando vieron la reacción de Iván y de Raquel, que se mostraron muy afectados por haber salido nominados. Almudena entró en el confesionario y se puso a llorar porque se sentí arrepentido de haberles nominado y Julito y Gisela mintieron cuando fueron preguntados por sus nominaciones para no meterse en líos.

La gran bronca entre los dos bandos

La sombra del boicot en las negociaciones provocó la peor bronca que hemos visto desde que comenzó la décima edición de 'Gran Hermano'. Ana y Loli se enzarzaron en una tremenda discusión sobre el carácter de la uno y la otra y Mirentxu e Iván sacaron todos sus trapos sucios. La donostiarra terminó llorando y al final todos los concursantes acabaron pidiéndose perdón, aunque no sabemos cuánto durará la paz en esta casa tan polémica.