Nunca un levantamiento doble de camisetas había provocado un brote celos tan obvio como el de la pasada noche. Empecemos por el principio: en la última fiesta de los grandes hermanos, Raquel le hizo la siguiente ‘broma’ a Ricky (teniendo en cuenta que todas las bromas tienen algo de verdad): “¿Hacemos un streptease juntos?”, ocurrencia que a Suso no le hizo ninguna gracia y ante la que reaccionó ignorando a su novia durante el resto de la noche.
Lejos de tontear con otra chica, lo que hizo el motero fue aliarse con su rival y pasarse toda la velada hablando con Ricky, acuñando frases tan complejas como ésta: “Somos dos gallos en el mismo gallinero, pero tenemos buen corazón” o “Todos los tíos de España están deseando que me eche novia, Ricky”. En un momento dado, Raquel se acercó a su chico para proponerle un ‘edredoning ‘ y él lo rechazó porque prefería quedarse junto al canario para levantarse las camisetas, comparar sus pectorales y prometerse el uno al otro que no se iban a “comer la cabeza” por las mujeres. Eso es amistad.
En mala hora Sofía se puso a imitar a Suso levantándose ella también la camiseta y diciendo: “Hola, soy Suso. Mira mis oblicuos” y aprovechando el momento para resaltar: “¡Pero qué buena que estoy!”. Esta gracia (sin gracia) desató por completo los celos de Raquel, que acabó teniendo una fuerte discusión con Suso.
El motero le confesó a su chica que no le había gustado nada la broma del streptease. "A mí esas bromas no me van. Yo no estoy para niñatadas. Raque. La que pierdes eres tú, campeona. Si me conocieras, sabrías que un streptease me molesta. Tengo más noches que el camión de la basura. Yo lo tengo claro, eres una niña de 16 años. No parece que tengas 29 años. Yo solo he bailado con mi amigo. No he bailado con nadie. A mí estas cortadas de rollo no me van. Tú esta noche conmigo no duermes. Déjame tranquilo, pasármelo bien y hablamos mañana".
Ante este corte por parte de Suso, Raquel estalló: “¡Te quiero tanto!. Te estoy dando tanto!. No soy una tía de hablamos mañana. Si entro en el juego (de Sofía) me expulsan. Mírala, la guarra, es que le arranco los pelos,¡le arranco los pelos!", dijo con cara de agresividad máxima. Y Suso le respondió que se estaba “obsesionando” con Sofía.