La primera ministra británica, Theresa May, se va del Consejo con las manos vacías. Los Veintisiete han rechazado tajantemente ayudarla si no logra que el Parlamento británico apruebe el acuerdo sobre el Brexit pactado en Bruselas. May no ha sido capaz de decir cuando se ratificará el acuerdo en Londres a 100 días de que entre en vigor el Brexit.