Legislación de la eutanasia en otros países

La intención de acelerar el fallecimiento de una persona en situación terminal y dolorosa se trata de una materia que es regulada de manera distinta dependiendo del país que se trate. En función de esa regulación, casos como el de Fabiano Antoniani han reabierto el debate sobre el suicidio asistido en Italia, que quedó ciego y tetraplégico en un accidente de coche y viajó después a una clínica suiza para poner fin a su existencia acompañado de un hombre sobre el que pesan doce años de condena. También se recuerda el caso de la estadounidense Britanny Maynard, que se trasladaba desde California a Oregon para acabar legalmente con un cáncer de cerebro terminal. Una medida que impulsó la ley de la eutanasia en aquel territorio. En el Reino Unido, Tony Nicklinson murió de neumonía una semana después de perder su última batalla contra la justicia británica, algo que le impidió fallecer a pesar de estar inmovilizado totalmente de cuello para abajo. En Bélgica, sin embargo, la atleta paralímpica Marieke Vervoort conseguía legalmente firmar los papeles para terminar con su vida cuando la enfermedad degenerativa que padece fuese insoportable. De momento, sigue disfrutando de su día a día y recientemente aparecía felicitando el año 2019.