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Naomi y Napoli son puro fuego, en todos los sentidos. Los dos tienen mucho carácter, lo que les hace chocar constantemente. Tienen muchas discusiones y, en la última, la novia de Adrián le aseguró al italiano que no iba a volver a acercarse a él.
Todo empezó porque era el turno de Napoli en uno de los juegos que hacen las chicas y los solteros en las fiestas y el italiano dijo que él iba a participar con la chica que quisiera. Esto no le gustó nada a Naomi que, aunque jugó con él, lo hizo con mucha desgana. “Estoy tan cansado de esto, te lo juro”, decía el pizzero.
Luego los dos estuvieron hablando, pero no arreglaron nada. “Te juro por Dios que es la última vez que me acerco a ti (…) Siempre haces lo mismo: De repente no me hablas más. Mira cómo estás de enfadado. Me amargas”, le dijo ella, para después irse y dejar a Napoli solo en la barra.
Después volvieron a hablar, pero sin acercar posturas. De hecho, Naomi se enfadó más e incluso se fue de la fiesta. “Me he subido a la habitación porque no soporto más a Napoli. Estoy muy cabreada, estoy muy harta y se lo va a tener que currar”, explicó.
Luego volvió a bajar, todavía mosqueada y creyendo que Napoli se había ido a dormir sin decirla nada. Pero se equivocaba. Él fue a buscarla para volver a hablar y le dijo que se fuesen a un sitio solos. La novia de Adrián se negó y le pidió que la acompañara a su habitación, que se iba a poner el bañador.
Cuando se quedaron a solas, a pesar de que ella seguía enfadada, se dejó llevar por la atracción que siente por el italiano: los besos en la cama terminaron con una ardiente sesión de sexo.