Manuel rompe a llorar en la hoguera: "Siempre querré a Lucía a pesar de todo"

Manuel ha sido el primer participante en caer en la tentación. El novio de Lucía se besó la misma noche con Fiama y con Stefany haciendo que la luz de la tentación se activase en numerosas ocasiones. El gaditano ha llegado muy nervioso a la hoguera y ha roto a llorar cuando ha llegado su turno.

"Estos días en la villa me he dejado llevar, he sido súper egoísta y he fallado a Lucía en varias ocasiones. He reventado la relación, seguramente la pierda. Son sentimientos muy contradictorios, no quería hacerle daño, me ha salido y no he pensado en nadie más que en mí, me da mucha pena. Lucía es la persona que más he querido, me lo ha dado todo, sé que le voy a hacer daño. Creo que lo habrá pasado muy mal, que no ha disfrutado y que se ha acordado mucho de mí", se ha sincerado el participante con Sandra Barneda.

Sin embargo, Manuel se ha quedado blanco al ver a Lucía bailando con Carlos. "La verdad es que me llevo una sorpresa, parece que se lo está pasando bien también. Ella no baila nunca y estaba bailando una bachata pegadita. Yo he soltado un beso pero a ella también le he visto una actitud muy echada para adelante. No esperaba que estuviera así, la he visto tontear con el tío, para que nos vamos a engañar. No reconozco a esta Lucía. No la he visto echar el freno", dice el 'Jesulín' de Puerto Real.

"Se contradice, habla mal de mí pero cuando escucha la alarma le entra el miedo. Lo que más me duele es verla llorar, se pone en lo peor. La he querido, la quiero y la querré siempre a pesar de todo. Viendo estas imágenes creo que puede llegar a liarse con algún solero de la villa aunque Carlos tiene que nacer tres o cuatro veces para tener la cara que tengo yo, es muy normalito", ha comentado.

Manuel sigue avanzando con Fiama

Manuel ha decidido olvidarse de Stefany y ha preferido seguir conociendo a Fiama.

La hoguera de Lucía

Tras descubrir el engaño de Manuel, Lucía ha estallado contra su novio. "Venía aquí harto de llorar y quería que confiara en él, de vergüenza. No se merece nada de mí y no lo va a tener. Ya llorará, pero que llore. Lo mismo que he llorado yo y más. Sabía que había sido él. Es un mierdas. Siento que me ha vuelto a humillar. Me siento una porquería pero él es mucho más porquería que yo, porque yo no le he faltado el respeto en mi vida. Así va a quedar. Es un caliente asqueroso, que haga lo que quiera".