Teresa la alcaldesa y una arruinada Araceli invaden la casa de Enrique

Justo cuando Enrique se quejaba de su soledad, Teresa la alcaldesa ha aparecido en la puerta de su casa para tener un encuentro sexual con él; y justo después de consumarlo, Araceli, a la que Reme ha abandonado y dejado sin trabajo, se ha plantado en el apartamento recordándole a su exmarido que la mitad aún le pertenece.
