Tiene 14 años y, aunque es de Cáceres, vive en Fuenlabrada. La música es el sueño de Aarón y, ya que ha sido seleccionada para las audiciones a ciegas, su objetivo está claro: “Ya que estoy aquí, voy a ganar”. Además, quiere triunfar para dedicárselo a su hermano, cuya pasión por la música le animó a cantar.
La actuación de Aarón: ‘Vencer al amor’
Bisbal fue el primero en pulsar, Rosario y Malú le siguieron enseguida. Y que los coaches se dieran la vuelta no hizo sino animar a Aarón, que acabó su interpretación de ‘Vencer al amor’ con el aplauso del público. Su familia aplaudía en la sala y Jesús Vázquez gritaba: “¡Extremeño y flamenco!”
Los coaches pujan por la voz de Aarón
Rosario Flores se había dado la vuelta porque la voz de Aarón le transmitía algo diferente: “Te has puesto un poco nervioso pero creo que tienes un alma y un sentimiento muy bonito cantando, me gustaría que te vinieras a mi equipo y aquí me tienes si me quieres”. Bisbal coincidía con su compañera y le aseguraba que en el programa podría mejorar. Por último, Malú apreciaba su sentimiento cantando y la dificultad del tema: “Es cierto que hay matices y siempre los va a haber, también es cierto que es una canción muy complicada y no te has venido abajo, me encantaría que estuvieras en mi equipo”.
La decisión de Aarón
El público le aconsejaba y él dudaba. Malú aconsejaba a Aarón que decidiera sin presión: “No te agobies ni lo más mínimo, con quien te vayas vas a estar bien, toma la decisión con la que vayas a estar más a gusto” Y Aarón desvelaba que siempre había tenido claro con quién quería estar, con Malú.
Aarón, en una nube
“¡Los tres! ¡Los tres!”, gritaba la madre de Aarón cuando él salía del escenario. Se reunía con su familia entre abrazos y nos confesaba que aún no podía creerlo: “Me siento como si estuviera en una nube, siempre me decía ‘se pueden girar pero lo más probable es que no se giren”.
Malú: “Lo importante es que su voz sea bonita y tenga sentimiento”
“Tiene sentimiento, se dirige al público”, decía David Bisbal cuando Aarón se marchaba de plató y Malú, su coach, coincidía: “Es verdad que ha tenido ciertos puntos de descontrol pero su voz es muy bonita y le ponía mucho sentimiento, es una cuestión de que se asiente más así que estoy muy contenta”.