La madre de Marta, a Miguel Carcaño: “Por favor, dime dónde está el cuerpo de mi niña"
Como último intento desesperado por conseguir que confesara dónde esta el cuerpo de su hija, la madre de Marta escribió una carta a Miguel Carcaño a la cárcel pidiéndole que se lo dijese.
“Hola Miguel seguramente no quieras leer esta carta, pero me veo en la obligación de hacerlo en una última súplica a la persona que tiene en sus manos terminar con una interminable tortura que es el no saber dónde esta mi hija.
Imaginar que lo sonrisa que tanto te gustaba de ella se pudre un basurero, o en el fondo del río, o sepultada en una tumba, que no es tumba sino un hoyo escondido…
Con la muerte de tu madre te quedaste sólo, pero con la muerte de mi hija te has quedado vacío, el vacío en el estomago que no te deja dormir porque no hay acto mas cruel y despreciable que quitarle la vida a una persona y más aun si esa persona te tenia el cariño que te Marta. Porque marta siempre se alegraba cuando las cosas te iban bien.
Sólo quiero que me digas por tu madre, Miguel dónde está el precioso cuerpo de mi niña...."
El juicio no ha sacado nada en claro y no ha mostrado nada que no se supiera. Según el fiscal, Miguel y el Cuco estrangularon y mataron a Marta, y Samuel les ayudó a deshacerse del cuerpo. Por su parte, Francisco Javier, el hermano de Miguel y su novia María como mínimo encubrieron todo el asunto.
1000 días después el paradero de Marta del Castillo todavía es un misterio. “Esta situación es lo peor que le puede pasar a una persona. El tener que respirar el mismo aire que el asesino de tu hija. Es muy duro tener que estar delante de los que te han sometido a una tortura durante casi 3 años con esa frialdad y encima tener que aguantarte la ira”, confiesa la madre de Marta. El padre de Marta lo que no entiende es que “si han confesado lo mayor, déjame que le pueda llevar flores a una tumba”
El juicio ha sido muy duro para toda la familia que asegura que “nunca hemos tenido esperanza”. Para Eva Casanueva, lo que más le preocupaba era que “toda esa fortaleza que tenia se me derribara delante de ellos. Quería dejarles claro que seguía fuerte y luchadora sin un ápice de derrumbe“.
La necesidad y desesperación por encontrar el cuerpo de Marta es tal que el propio Antonio del Castillo confiesa que “podríamos a lo mejor llegar a un acuerdo de una rebaja dependiendo de la condena que le caigan”. Eso sí, “sin sacar a Miguel Carcaño”. Antonio confiesa en el programa especial que llamó a la madre de María, novia de Francisco Javier, y “le ofrecí al oportunidad de hablar con el fiscal si nos decía dónde estaba el cuerpo. A la semana como no me llamo le llame y me dijo que no que su hija y su yerno eran inocentes”.
El padre de Marta, que conocía a Miguel, asegura que “siempre ha sido muy callado y con la cabeza gacha. Yo a Marta siempre le decía, tú éste le gustas y desgraciadamente no me equivoqué”.
Durante el juicio Miguel parecía ”una roca”, asegura Eva, “es lo que más me sorprendió porque no logró entender cómo era capaz de estar tan tranquilo”. "Miguel no piensa, es como un burro que le mandan por un camino y no se sale”, asegura Antonio, "hasta los psicólogos dicen que Carcaño es incapaz de planearlo todo".
Javier Urra, psicólogo forense asegura que el relato del cenicero y el testimonio de Carcaño asegurando que el crimen no fue intencionado "es totalmente falso. Todo el mundo que hemos trabajado en la justicia sabemos que se hizo porque se quería hacer".
El careo de Carcaño y Samuel
Durante el juicio los padres de Marta pidieron a la justicia que se realizase un careo entre los implicados. Carcaño y Samuel se enfrentaron, pero el careo no fue lo que se esperaba. “Entiendo y agradezco a los jueces ese miramiento de no negarnos el careo, pero no me supo a nada. Yo hubiese preferido un carero con el menor o con Francisco Javier, con preguntas. Nos quedamos con la impotencia de que del careo se podía haber sacado más, fue muy corto. Fue como una discusión de dos amigos en un bar", aseguran los padres de Marta
Un nuevo testigo, el taxista
La aparición de un nuevo testigo en medio del juicio arrojó un poco de luz al caso haciendo caer la coartada de Francisco Javier quien aseguraba haber estado en un bar a esas horas. “El taxista es lo mejor que ha pasado en el juicio, lo más fresco. Es un testimonio claro, y comprensible”, asegura el padre de Marta.
Desolada, Eva Casanueva, asegura que tiene que sacar fuerzas para seguir adelante y “sé que esa fuerza me la da Marta desde donde esté. Tengo que sacarla para hacer que la vida de mis otras dos hijas sea, dentro de este dolor, lo más normal posible".