Mercedes Milá y Sardá, la complicidad en Islandia

La presentadora ya es experta en las expediciones organizadas por el equipo de Dutifrí ya que en su anterior temporada acompañaba a Sardá hasta la India. Un viaje donde dieron un paseo en elefante, observaron el trabajo de un dentista en plena calle, disfrutaron del 'Gran Hermano' en su versión india... y donde protagonizaron un beso de película ¿qué nos deparará la segunda experiencia?

Entre Javier y Mercedes surge algo que la presentadora define como'en su blog, 'Y es que la periodista ha narrado todas sus aventuras en la Isla, en primicia, a los internautas de Telecinco.es la complicidad' Lo que me sale del bolo'.

En su primer post 'Desde Islandia', Mercedes reconocía que viajar no es lo que más feliz le hace pero creía haber recibido "un regalo" conociendo "un país de dimensiones humanas, muy pequeño, donde la gente aún no necesita gritar para hacerse sitio".

Se sorprendía por su geografía, desprovista de una gran vegetación y sumergida en hielo, géiseres o lagos. También de su población, tan sólo 312.000 habitantes pero, sobre todo, que un lugar lleno de rincones "mágicos" sea también el escenario de muchos suicidios provocados en parte por "los largos inviernos sin ver la luz del sol".

Juntos se convertirán en invitados a una fiesta vikinga -con asado de cordero en plena calle incluido- y se sumergirán en la espectacular Laguna Azul, una acumulación de aguas sulfurosas producida a partir de la refrigeración de una fábrica de electricidad. Allí, probarán en su piel las propiedades beneficiosas del barro y los vapores del paraje.

En una de las fotografías que enviaba a telecinco.es se preguntaba Entre Sardá y Milá es evidente que existe esa complicidad a la que alude Mercedes, "so es lo que tenemos Javier Sardá y yo, porque decidme si no cómo se puede uno meter en ese Lago Azul de agua sulfurosa que sale de refrigerar una fábrica de electricidad", sin duda un gran momento del que la presentadora quería dejarnos testimonio gráfico ¿qué tendrá este hombre? enviándonos las fotografías.

Con este viaje, se despide la temporada de Dutifrí, "fue bonito compartir esos momentos", nos contaba, "acabar un trabajo que te ha llevado por 26 países del mundo durante dos años te arranca lágrimas."