Marina tiene una reunión muy imporante, su amiga del alma se acaba de separar y ha invitado a todas aquellas que están a punto de darle el adiós definitivo al que ellas pensaban era el amor de su vida. Así, decide ir con Roberto a esta reunión "de punta en blanco". Sin embargo, Roberto no está por la labor.
Todo parece indicar que Marina está a punto de poner las maletas de Roberto en el rellano del edificio. Sin embargo, una sospechosa marca en su camisa la pone sobre aviso de una posible infidelidad. Así, entre lamentos le confiesa a su amiga que "estoy enamorada y me hundo si me entero de que me es infiel". Así, descubrimos que Marina sigue enamorada de Roberto a pesar de todo de las cosas de cada día. Cuando el peligro acecha afloran los verdaderos sentimientos.
Roberto llega a casa 7 minutos tarde lo que para Marina supone la confirmación perfecta de una infidelidad, así, cuando Roberto cruza el umbral de la puerta le pedirá el divorcio sin alegar ningún tipo de motivos. Roberto no cree lo que ve ¿estás loca? ¿has bebido?
Pero lo único que le sucede a Marina es que está celosa. Por ello, abrirá una investigación al más puro estilo de C.S.I. para averiguar de donde procede la misteriosa mancha de Roberto. Finalmente, no es más que un poco de sangre que Roberto se hizo mientras se afeitaba.