Las declaraciones más polémicas de Doña Sofía en el libro de Pilar Urbano

Sobre la homosexualidad

"Comprender, aceptar, y respetar que haya personas con otra tendencia sexual, pero ¿que se sientan orgullosos de ser gays?, ¿qué se suban a una carroza y salgan en manifestaciones? Si todos los que no somos gays saliéramos en manifestación colapsaríamos el tráfico. Si esas personas quieren vivir juntas, vestirse de novios y casarse, pueden estar en su derecho, o no, según las leyes de su país: pero que a eso no lo llamen matrimonio, porque no lo es".

"La inmensa mayoría de las familias son normales, como ha sido siempre la familia natural".

"Si los gays quieren casarse, pueden estar en su derecho, pero que a eso no lo llamen matrimonio, porque no lo es".

Cuando Pilar Urbano le preguntó si estaba a favor del aborto...

"En absoluto. Hay que respetar a toda criatura que ha empezado a vivir; eso no es retrógrado ni cosa de cristianos, es seguir la ley natural".

Sobre la cuestión de la eutanasia...

"No soy partidaria. La vida y la muerte no están en nuestras manos".

Sobre la polémica Ley de Igualdad...

"No me gustan las cuotas en los cargos del gobierno, quien valga que dirija, sea hombre o mujer".

Sobre la candidatura de Barack Obama...

"Más que partidaria de Obama, me siento muy satisfecha por la posibilidad de que un negro pueda llegar tan alto. Poner en unas manos negras tanta responsabilidad. Eso ya me parece un triunfo".

Sobre la violencia de género...

"Violencia doméstica... ha ocurrido siempre. Ahora se informa más y con todo detalle. En cierto modo, se provoca un contagio".

Sobre la asignatura de religión...

"En los colegios se ha de enseñarm religión, al menos hasta cierta edad. Los niños necesitan una explicación del origen del mundo y de la vida."

Sobre la eutanasia...

"No soy partidaria de la eutanasia. La vida y la muerte no está en nuestras manos. Mientras el enfermo aguante, mientras resista en su lucha por la vida y la muerte, los familiares han de aguantar también y seguir ayudándole".

Sobre la quema de fotos...

"Fue un disgusto para todos nosotros. ¿Preocupación? Ninguna. Era un puñadito de jóvenes en una universidad, no era algo masivo. Pero... no lo habíamos visto nunca."

Sobre Hasan II...

"A mi marido intentaba tenderle trampas: "Ven, ven a Ceuta o a Melilla, y yo te monto allí un recibimiento por todo lo alto. Había que decirle: Pero Hasan, ?cómo vas a recibirme tú a mí en unas tierras que son mías"?

Sobre la Monarquía y la República...

"El pueblo varias veces ha dicho sí a la Monarquía... Hoy, un republicano en España está tan fuera del contexto actual del país... como un monárquico en Francia".

Sobre el papel de la Familia Real...

"Nosotros somos independientes del signo del Gobierno de turno. Independientes, no indiferentes".

Sobre la posible abdicación del Rey

"El Rey no abdicará jamás. Ni lo hablamos nunca, se da por sobrentendido que reinará hasta la muerte. A un rey sólo debe jubilarle la muerte. Salvo que... lo deseable, lo conveniente por el asentamiento de la propia institución en los tiempos nuevos de España es que el Rey muera en su cama y alguien diga: el Rey ha muerto, ¡Viva el Rey!

Sobre la relación de Don Felipe con Doña Letizia

"No fui la primera en conocer la relación entre mi hijo y Letizia, pero sí la primera en adivinarlo".

"Yo ya mosqueada me preguntaba, ¿qué tendrá el telediario de las tres? Me iba a la sala y me senté a verlo con él varias veces. Las noticias del verano tampoco son muy allá, como te puedes imaginar, en el telediario cambiaba todo cada día, bueno. . . todo menos ella y él hacía comentarios: lo hace muy bien ¿no? , es guapa ¿eh? '. Por eso cuando después me lo dijo no me cogió por sorpresa".

"Mamá, estoy enamorado, muy enamorado de Letizia. Me encanta, la quiero y pienso casarme con ella (...) me contó cosas de su vida, cómo era y cómo pensaba".

"Ellos estaban esperándonos. Felipe había hecho que preparasen una especie de merienda de picar, canapés y pinchos frescos, como si fuera lo más natural del mundo. Pero de natural nada, estábamos los cuatro nerviosos como flanes. Sabíamos que aquello iba en serio y ese primer contacto era muy importante".

"No, no hubo que convencer al Rey. Letizia le gustó. Le sorprendió (...) En este caso, media clave era que yo veía a mi hijo muy enamorado y muy feliz y la otra media era que igual de enamorada y de feliz la veía a ella. Por eso me decía, 'esto puede funcionar".

"Sólo me casaré por amor, yo no identifico necesariamente sucesión y matrimonio (...) Con estas palabras de entonces ya lanzaba un aviso, que prefería reinar soltero a amarrarse con un casamiento por conveniencia de estado. Un matrimonio sin amor, sería insoportable, me dijo una vez".