A lo largo de once capítulos, Erika analiza la historia del porno, el feminismo y hasta elabora un 'diccionario del porno' con todos esos términos que una siempre quiso saber qué narices significan pero nunca se atrevió a preguntarlo. Todo ello en pro de lo que ella misma llama una 'masturbadora informada'. "Ellas son la mujeres que tienen tanta información que ya han llegado al punto donde pueden elegir su propia pornografía, sus propios medios para llegar al placer y poder disfrutar. Creo que uno de los temas más importantes de la sexualidad femenina es cómo los hombres durante siglos han tenido el derecho a su propio placer mientras que las mujeres no", explica la directora de cine porno.
"Nuestro placer siempre ha sido visto desde la perspectiva de la reproducción, siempre ha sido algo relacionado con que el cuerpo de la mujer está preparado para tener hijos. Ahora empezamos a tener ese derecho de disfrutar solas y que no sea mal visto", añade quien de un tratado sobre algo tan aparentemente frívolo y banal como el porno, ha conseguido hacer una reivindicación feminista.