Aprilia Mana 850, una naked para gozar

TELECINCO.ES 24/03/2009 12:17

La instrumentación de la Mana es analógica y digital, y es un ordenador Matrix el encargado de gestionar los cambios. El chasis ha sido fabricado en acero y el carenado es prácticamente una anécdota. No hay que olvidar que esta moto supera los 200 kilos y, por eso, el depósito de combustible se ha desplazado para ofrecer al usuario un mejor reparto del peso. En su lugar, se ha incorporado un compartimento para guardar el casco.

El desarrollo de la Mana 850 le ha costado a la marca del Véneto casi trece millones de euros. Su corazón mecánico está formado por un motor bicilíndrico en ‘v’ de 850 centímetros cúbicos, un propulsor de cuatro tiempos que puede rendir una potencia de 76 caballos.

El sistema de arranque de la Aprilia es eléctrico, aunque su principal novedad reside en su transmisión secuencial. Mediante un interruptor situado en la maneta derecha, el piloto podrá variar el cambio de marchas en cuatro posiciones diferentes. La modalidad 'Touring' es ideal para tramos urbanos y garantiza un confort extra y un consumo mínimo. La variante 'Drive Rain' asegura la estabilidad en caso de pérdidas de adherencia sobre superficies deslizantes. y para una conducción más deportiva, se puede optar por los cambios 'sport gear' o drive sport.

La Mana 850 acelera de 0 a 100 en 4,2 segundos y alcanza una velocidad máxima de 205 km/h. Su autonomía se establece en 280 kilómetros, ya que su consumo es de 5,8 litros a los cien y su depósito de combustible puede albergar hasta 16 litros.

En la parte ciclo, este modelo dispone de una suspensión delantera provista de una horquilla invertida y una trasera con monoamortiguador. Por su parte, el capítulo de los frenos se ha resuelto con un doble disco flotante y pinzas de cuatro pistones en el delantero, y un monodisco con pinza de uno en la zona posterior.

Musculosa, precisa y con una versatilidad fuera de toda duda. Y es que la Aprilia Mana 850 es de esas pocas motos que ofrece la comodidad de una scooter y la energía de una auténtica máquina de carreras.