En BMW nunca se conforman con ninguno de sus modelos y siempre buscan dar un paso más, y sobre todo, cuando hay varios rivales de la competencia que empiezan a plantar a cara a uno de sus automóviles más emblemáticos: el M4.

Quizá por ello, BMW acaba de confirmar la fabricación del M4 GTS, la versión más radical del deportivo alemán. Esta nueva variante, enfocada para circuitos, monta el mismo motor turbo con seis cilindros en línea del M4 convencional, pero eleva su potencia hasta los 500 CV, 69 CV más que su antecesor.

Un aumento que ha sido posible gracias a la incorporación de un innovador sistema de inyección de agua. Además, este propulsor va asociado una caja automática de doble embrague y siete velocidades que, unida a la mecánica de 3 litros, consiguen unas prestaciones que son para echarse a temblar: acelera de 0 a 100 en 3,8 segundos y alcanza una velocidad máxima de 305 km/h. Unas cifras que, sin duda, asustan.

Pese a este incremento de la potencia y de las prestaciones, los valores del consumo se mantienen igual, homologando un gasto medio de carburante de 8,3 l/100 kilómetros.

El peso también se ha reducido gracias, entre otras cosas, al empleo de materiales como la fibra de carbono en el capó y en el techo. Una rebaja que también ha sido posible gracias a la supresión de los asientos posteriores.

Impactante. Así es esta serie especial que llegará a finales de este año o principio de 2016 y que tan solo la podrán disfrutar 700 afortunados. No olvidéis su nombre: M4 GTS.