En un mes y medio, Cristina dará el sí quiero. Una boda que lleva meses planeando con ilusión pero a la que le faltará algo. Porque, hace unos días, esta sevillana perdía la pulsera que iba a acompañarla en ese día tan especial. Una joya antigua con mucho valor sentimental.
“Me la regaló hace unos meses mi suegra cuando le detectaron una enfermedad importante: ‘Para mi nuera, por si un día falto’ me dijo”, cuenta a NIUS. Por eso, esta pérdida es tan importante para ella. “Es un disgusto enorme, me da mucha pena. Es como un vacío el que deja”, reconoce esta joven que está moviendo cielo y tierra para encontrarla.
La perdió el pasado martes en la Feria de Abril. “Solo me la he puesto dos veces, en ocasiones especiales”, explica. Tenía un doble cierre de seguridad y no sabe cómo pudo abrirse. “Cuando llegué a casa ya no la llevaba puesta”. Cristina volvió sobre sus pasos, preguntó a caseteros, camareros y vigilantes de seguridad. “Estoy casi segura de que se me cayó en la caseta, pero nadie la ha visto”, se lamenta.
La pulsera es un cordón de oro y es consciente de la dificultad de que aparezca, pero no pierde la esperanza. “La magia de las redes ha conseguido cosas impresionantes”, dice. Ahora confía en que pueda ayudar a dar con su joya por la que está dispuesta a pagar “lo que haga falta”. Para ella, el valor es lo que significa, más allá de su precio. “Solo quiero recuperarla”, insiste.
Cristina no quería que su suegra se enterase de la pérdida. “Por si aparecía y que se ahorrase el disgusto”, nos cuenta. Pero, tras la difusión por redes sociales, lo ha terminado sabiendo. “Me ha dicho que no me preocupe, ¿qué me va a decir?”, señala Cristina que no puede evitar sentirse responsable porque sabe del valor que tenía para la familia.
En mes y medio dará el 'sí, quiero' y, aunque hace casi una semana que la perdió, sigue confiando en poder lucir la pulsera en su muñeca. El lugar de donde nunca debió desaparecer.